Limitará su participación a opinar: Miguel Ángel Rodríguez

Fuera de la política

Descarta casi totalmente demandar a quienes lo señalaron en caso ICE-Alcatel

Con el semblante tranquilo, rodeado de su familia y sus abogados en su casa de habitación en Escazú, Miguel Ángel Rodríguez, expresidente de la República, descartó ayer que su nombre vuelva a estar ligado a la política electoral.
Casi una semana después de conocer una sentencia del tribunal de apelaciones que lo absolvió de toda pena por el caso ICE – Alcatel, el exmandatario manifestó que su vida ha cambiado mucho y que “su camino es otro”.
No obstante, aclaró que seguirá opinando sobre los temas del país, que escribirá en los diarios columnas de opinión y que las puertas de su casa estarán abiertas “para sus amigos”, entre los que se encuentra ahora el grupo de abogados que lo defendió en los pasados ocho años.

“Este es un momento de celebrar la justicia que vine a buscar cuando dejé la secretaría de la OEA. Ese es el camino que quiero seguir, dando clases en la universidad, con mis columnas y otras cosas”, añadió Rodríguez.
Asimismo, reconoció que el proceso penal vivido lo cambió, pues todo el conocimiento, no alcanza si no existe “amor”.
En ese sentido, reflexionó que a pesar de todo, en su corazón hay perdón para las personas que lo acusaron, incluidos Francisco Dall´Anese, ex fiscal general y José Antonio Lobo, quien lo señaló por supuestamente orquestar una red de corrupción.
Por esta razón, ayer descartó prácticamente presentar una querella contra las personas que le hicieron daño.
“En este momento lo que tengo son deseos de perdón, hoy —ayer para los lectores— es el día de San Esteban, primer mártir cristiano que pidió perdón a Dios para las personas que lo apedrearon. A los que me involucraron, a los que inventaron pruebas, a los que me metieron a la cárcel ilegalmente y a los que me detuvieron ilegalmente en el aeropuerto, a todos ellos, les mando a decir que los perdono, que es un capítulo que ya pasó y que no le hagan esto a nadie más, porque no se vale”, dijo Rodríguez, visiblemente emocionado.
Entre 2002 y 2006 estallaron varios escándalos de corrupción, entre los que se encontraba el supuesto pago de dádivas millonarias para políticos costarricenses, por la concesión de compra de 400 mil líneas celulares a la empresa Alcatel por parte del ICE.
En ese caso, Rodríguez fue señalado por Lobo de supuestamente presionar a la empresa de origen francés para que pagara esos dineros. No obstante, con la resolución de los jueces del viernes anterior, esto quedó desacreditado.
“Si algo he aprendido, es que si uno no es juez y no tiene todas las pruebas, no puede meterse en esto de juzgar. Desdichadamente, estamos acostumbrados a condenar a las personas sin haberlas escuchado y eso va contra todos los principios de justicia y el cristianismo”, concluyó.

Esteban Arrieta
earrieta@larepublica.net