Frustrada apertura de parque Gezi
EFE | Martes 09 julio, 2013
"Ya veréis: cuando lleguemos esta tarde para encontrarnos en el parque, el gobernador volverá a mandar a la policía a cargar contra nosotros, algo completamente ilegal
Frustrada apertura de parque Gezi
Las autoridades turcas volvieron a cerrar ayer el acceso al parque Gezi de Estambul, epicentro de las protestas que desde finales de mayo sacuden Turquía, apenas tres horas después de que el gobernador de la ciudad lo abriera en una ceremonia oficial.
El gobernador de Estambul, Hüseyin Avni Mutlu, reabrió el parque, tras 23 días de vigilancia policial, ante decenas de cámaras de televisión, y prometió que el lugar sería "un renovado paraíso" para "los 14 millones de habitantes de Estambul".
"Este parque pertenece a los catorce millones de habitantes de Estambul, a los viejos, los niños, las embarazadas, los jóvenes", señaló el gobernador, representante del gubernamental Partido de la Justicia y el Desarrollo (AKP, islamista moderado).
La policía no abrió el espacio a los ciudadanos hasta después de que se hubieran marchado las autoridades, y lo volvió a evacuar apenas tres horas después, informa el diario "Hürriyet".
La medida parece tener como fin impedir la llegada de cientos o miles de manifestantes dispuestos a reunirse en el parque, siguiendo la convocatoria de la red Solidaridad con Taksim, que toma su nombre de la céntrica plaza de Estambul contigua al citado espacio verde.
El gobernador prometió en su discurso impedir que cualquier grupo determinado se apropie del parque.
Mutlu paseó por el parque, tomado por la policía desde hace tres semanas, ante decenas de cámaras de televisión, mientras que un centenar de ciudadanos, ávidos de recuperar el espacio verde, esperaban tras un cordón policial.
"Los parques pertenecen al pueblo. Convertirlos en un área de manifestaciones es una tortura para la gente. No podemos tolerar que un grupo se considere el pueblo y diga que el parque le pertenece", advirtió el gobernador.
Negó el rumor de que las autoridades instalarían tiendas para romper el ayuno en ramadán, pero confirmó que sí podrían colocarse mesas para este fin, en lo que la oposición ve como un intento de "ocupar" el parque con colectivos religiosos, afines al Gobierno.
Pero un grupo de manifestantes, que se lanzó al parque después de que se hubiera marchado el gobernador, temió que esta recuperación no sea tal, vistas las advertencias contra toda "manifestación".
"Ya veréis: cuando lleguemos esta tarde para encontrarnos en el parque, el gobernador volverá a mandar a la policía a cargar contra nosotros, algo completamente ilegal", advirtió un portavoz de la red Solidaridad de Taksim ante un centenar de personas que entraron a Gezi, acabada la ceremonia.
Durante las últimas tres semanas los obreros municipales han acondicionado el parque, cubriendo con nuevas placas de césped y flores las zonas destruidas en mayo por las excavadoras que iniciaron el proyecto de reurbanización de la zona, impulsado por el Gobierno turco.
Estambul/EFE