Flotilla rusa atracará en Cuba
| Martes 16 diciembre, 2008
Flotilla rusa atracará en Cuba
Buques de guerra rusos regresan a la isla por primera vez desde la caída de la URSS
Moscú
EFE
Barcos de guerra rusos atracarán esta semana en Cuba por vez primera desde la caída de la Unión Soviética (1991), un paso más en el acercamiento del Kremlin a los regímenes latinoamericanos más denostados por Estados Unidos.
“Esta será la primera visita de barcos de guerra rusos a Cuba desde tiempos de la Unión Soviética. La visita se prolongará hasta el 23 de diciembre”, anunció Ígor Digalo, portavoz de la Armada rusa a la agencia rusa Interfax.
La flotilla rusa, que estará encabezada por el destructor cazasubmarinos “Almirante Chabanenko”, llegará el próximo 19 de diciembre al puerto de La Habana, que se encuentra a unas 90 millas de Miami.
Además del “Almirante Chabanenko”, que participó a finales de noviembre en el mar del Caribe en las primeras maniobras navales ruso-venezolanas, también visitarán Cuba dos buques de apoyo, el “Iván Bubnov” y el “SB-406”.
“Los cubanos tendrán la oportunidad de visitar los buques rusos. La visita de la flotilla rusa a La Habana es un importante paso práctico en aras del fortalecimiento y desarrollo de los contactos entre las Armadas de ambos países”, apuntó.
Entre otros actos, los marinos rusos se reunirán con sus homólogos de la Armada cubana y el alcalde de la capital de esa isla caribeña.
Como si no hubiera pasado el tiempo, los marinos rusos depositarán flores en los monumentos a José Martí y a los soldados soviéticos-internacionalistas, y darán un paseo por La Habana.
La capital de la isla caribeña, sometida a un embargo estadounidense desde 1960, acogió desde el triunfo de la revolución en 1959 hasta la caída de la URSS una nutrida colonia soviética.
Recientemente, Vladímir Putin, primer ministro ruso, había expresado su confianza en que las autoridades cubanas permitieran el atraque de los buques de guerra rusos, tras la firma de un acuerdo al respecto con Venezuela.
Precisamente, después de unos primeros contactos prometedores tras la llegada al Kremlin de Putin, que visitó la isla al principio de su mandato, las relaciones sufrieron un duro revés en 2001.
Ese año Moscú decidió cerrar la base de espionaje electrónico de Lourdes, último residuo de la masiva presencia soviética en Cuba durante la Guerra Fría.
No obstante, Moscú ha pedido en varias ocasiones durante los últimos meses el fin del embargo estadounidense a Cuba al considerarlo un “vestigio de la Guerra Fría”.
En su primera gira latinoamericana, el nuevo presidente ruso, Dmitri Medvédev, visitó a finales de noviembre Cuba, donde se reunió con su colega, el general Raúl Castro, y con el convaleciente líder cubano, Fidel Castro.
Tras reunirse con el jefe del Kremlin, Fidel Castro aseguró que Rusia, China y Venezuela eran los “pilares” para los negocios de la isla frente al bloqueo estadounidense.
Según ambas partes, las relaciones ruso-cubanas se encuentran en su mejor nivel desde la caída de la Unión Soviética, para la que el régimen cubano era su principal aliado en la región.
Rusia concedió en noviembre un crédito a La Habana de $20 millones, como parte de diez acuerdos sobre las industrias del níquel y automotriz, el petróleo y el suministro de trigo a la isla.
En los últimos meses, la Armada rusa ha reanudado las patrullas y las maniobras en diversas zonas del globo, actividad que había suspendido tras la caída de la URSS, lo que ha causado alerta entre los países miembros de la OTAN.
A finales de noviembre el crucero ruso de propulsión nuclear “Pedro el Grande” y el destructor “Almirante Chabanenko”, entre otros buques, participaron en las primeras maniobras navales ruso-venezolanas en el mar del Caribe.
En cualquier caso, el embajador de Estados Unidos en Moscú ha negado cualquier paralelismo entre la crisis de los misiles protagonizada por Estados Unidos y la URSS en Cuba en 1962 y las maniobras rusas en el Caribe y otros lares.
El diplomático subrayó que la “Guerra Fría se ha terminado y el conflicto ideológico que dio origen a la crisis ya no existe”.
En el marco del acercamiento entre Rusia y Latinoamérica, el presidente de Nicaragua y también fiel aliado de la URSS en Centroamérica, Daniel Ortega, visitará esta semana Rusia.
Precisamente, Ortega dio el viernes la bienvenida a tres buques de guerra rusos, entre ellos el “Almirante Chabanenko”, que llegaron a Nicaragua sin la autorización del Congreso nicaragüense.
Buques de guerra rusos regresan a la isla por primera vez desde la caída de la URSS
Moscú
EFE
Barcos de guerra rusos atracarán esta semana en Cuba por vez primera desde la caída de la Unión Soviética (1991), un paso más en el acercamiento del Kremlin a los regímenes latinoamericanos más denostados por Estados Unidos.
“Esta será la primera visita de barcos de guerra rusos a Cuba desde tiempos de la Unión Soviética. La visita se prolongará hasta el 23 de diciembre”, anunció Ígor Digalo, portavoz de la Armada rusa a la agencia rusa Interfax.
La flotilla rusa, que estará encabezada por el destructor cazasubmarinos “Almirante Chabanenko”, llegará el próximo 19 de diciembre al puerto de La Habana, que se encuentra a unas 90 millas de Miami.
Además del “Almirante Chabanenko”, que participó a finales de noviembre en el mar del Caribe en las primeras maniobras navales ruso-venezolanas, también visitarán Cuba dos buques de apoyo, el “Iván Bubnov” y el “SB-406”.
“Los cubanos tendrán la oportunidad de visitar los buques rusos. La visita de la flotilla rusa a La Habana es un importante paso práctico en aras del fortalecimiento y desarrollo de los contactos entre las Armadas de ambos países”, apuntó.
Entre otros actos, los marinos rusos se reunirán con sus homólogos de la Armada cubana y el alcalde de la capital de esa isla caribeña.
Como si no hubiera pasado el tiempo, los marinos rusos depositarán flores en los monumentos a José Martí y a los soldados soviéticos-internacionalistas, y darán un paseo por La Habana.
La capital de la isla caribeña, sometida a un embargo estadounidense desde 1960, acogió desde el triunfo de la revolución en 1959 hasta la caída de la URSS una nutrida colonia soviética.
Recientemente, Vladímir Putin, primer ministro ruso, había expresado su confianza en que las autoridades cubanas permitieran el atraque de los buques de guerra rusos, tras la firma de un acuerdo al respecto con Venezuela.
Precisamente, después de unos primeros contactos prometedores tras la llegada al Kremlin de Putin, que visitó la isla al principio de su mandato, las relaciones sufrieron un duro revés en 2001.
Ese año Moscú decidió cerrar la base de espionaje electrónico de Lourdes, último residuo de la masiva presencia soviética en Cuba durante la Guerra Fría.
No obstante, Moscú ha pedido en varias ocasiones durante los últimos meses el fin del embargo estadounidense a Cuba al considerarlo un “vestigio de la Guerra Fría”.
En su primera gira latinoamericana, el nuevo presidente ruso, Dmitri Medvédev, visitó a finales de noviembre Cuba, donde se reunió con su colega, el general Raúl Castro, y con el convaleciente líder cubano, Fidel Castro.
Tras reunirse con el jefe del Kremlin, Fidel Castro aseguró que Rusia, China y Venezuela eran los “pilares” para los negocios de la isla frente al bloqueo estadounidense.
Según ambas partes, las relaciones ruso-cubanas se encuentran en su mejor nivel desde la caída de la Unión Soviética, para la que el régimen cubano era su principal aliado en la región.
Rusia concedió en noviembre un crédito a La Habana de $20 millones, como parte de diez acuerdos sobre las industrias del níquel y automotriz, el petróleo y el suministro de trigo a la isla.
En los últimos meses, la Armada rusa ha reanudado las patrullas y las maniobras en diversas zonas del globo, actividad que había suspendido tras la caída de la URSS, lo que ha causado alerta entre los países miembros de la OTAN.
A finales de noviembre el crucero ruso de propulsión nuclear “Pedro el Grande” y el destructor “Almirante Chabanenko”, entre otros buques, participaron en las primeras maniobras navales ruso-venezolanas en el mar del Caribe.
En cualquier caso, el embajador de Estados Unidos en Moscú ha negado cualquier paralelismo entre la crisis de los misiles protagonizada por Estados Unidos y la URSS en Cuba en 1962 y las maniobras rusas en el Caribe y otros lares.
El diplomático subrayó que la “Guerra Fría se ha terminado y el conflicto ideológico que dio origen a la crisis ya no existe”.
En el marco del acercamiento entre Rusia y Latinoamérica, el presidente de Nicaragua y también fiel aliado de la URSS en Centroamérica, Daniel Ortega, visitará esta semana Rusia.
Precisamente, Ortega dio el viernes la bienvenida a tres buques de guerra rusos, entre ellos el “Almirante Chabanenko”, que llegaron a Nicaragua sin la autorización del Congreso nicaragüense.