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NACIONALES


Exportaciones en riesgo

Raquel Rodríguez rrodriguez@larepublica.net | Miércoles 15 mayo, 2013


Las plantas ornamentales estarían afectadas por la no aprobación del acuerdo comercial con la Unión Europea, como estas de la finca de Álvaro Sáenz. Marco Monge/La República


Análisis
Diputados Fishman y Villalta paralizan proyecto

Exportaciones en riesgo

Productores de frutas tropicales y jugos serían los sacrificados


Hoy es la fecha límite para que el texto esté votado en primer debate; de no lograrlo, el país perderá las preferencias de exportación a la UE a partir del año entrante.

El desvelo afectaría a cientos de empresas y decenas de miles de empleados, que viven de las ventas a Europa.
Sacrificar el ahorro anual de $12 millones es la consecuencia que tiene la no aprobación del acuerdo para los exportadores de jugos.
Eso por la obligación de seguir pagando el arancel del 20% promedio, por la importación en la UE, a cambio de aprovechar la exoneración que traería el acuerdo.
En el caso de la piña y el melón, el arancel pagadero sería menor.
Sin embargo, estas exportadoras tendrían que pagarlo a partir de enero, el cual tendría un efecto negativo en el margen de ganancia, de modo que las empresas tendrían menos dinero para invertir en Costa Rica.
El total de los aranceles pagaderos en esas frutas ronda los $30 millones.
También otros productos locales tendrían que pagar impuestos para entrar a la UE a partir del año entrante.
Si Costa Rica no firmara el Acuerdo, las empresas exportadoras perderían el beneficio del llamado Sistema General de Preferencias, bajo el cual actualmente no pagan ningún arancel.
Este sistema vence a final de año, y la idea es que el Acuerdo lo sustituya.
En tanto, para el consumidor el atractivo del Acuerdo está en pagar precios menores por muchos productos europeos, como quesos, jamón, tocino, whisky y vehículos, cuyos costos se reducirán, una vez que empiece el comercio libre con la UE, el cual eliminará varias barreras al intercambio bilateral, sobre todo los aranceles.
Estos productos actualmente pagan impuestos por la importación en Costa Rica, de entre el 15% y el 65%.
Otra forma en que los consumidores costarricenses ahorrarán dinero tiene que ver con la eliminación de varias trabas relacionadas con el comercio bilateral, sobre todo la unificación de varios procedimientos involucrados.
Con la armonización de los sistemas arancelarios de los países centroamericanos, tal como el Acuerdo lo obliga hacer, se reducirá el costo en que incurren los exportadores europeos, de modo que puedan vender sus productos en nuestro mercado a un precio más cómodo.
Actualmente, cada país centroamericano impone sus propias normas, desde las definiciones de los productos hasta los formularios utilizados en la importación.
Además, la UE se compromete a brindarle a la región una ayuda técnica.
Todo este problema se da por la negativa de dos diputados de votar el Acuerdo en la Asamblea.
Luis Fishman y José María Villalta quieren que el Gobierno ponga a votación proyectos que modifican las condiciones de trabajo en la Asamblea, aunque esos no tengan relación con el Acuerdo.
Hasta que eso no suceda, no permitirán que se vote.
El riesgo es que la UE exige que hoy esté el Acuerdo votado al menos en primer debate, según Anabel González, ministra de Comercio Exterior.
Al no lograrlo, a partir de enero se perderán beneficios para exportar con privilegios arancelarios.
A excepción de Costa Rica, los demás países centroamericanos logran cumplir el plazo.

Raquel Rodríguez
Daniel Chacón
rrodriguez@larepublica.net
dchacon@larepublica.net







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