Logo La República

Domingo, 5 de mayo de 2024



NOTA DE TANO


En Angelina College de Texas, Tannia cumplirá su sueño

Gaetano Pandolfo gpandolfo@larepublica.net | Miércoles 08 marzo, 2023


futbol
Tannia Díaz Alvarez, ejemplo de superación y perseverancia


Hay una muchacha, quizá de unos 20 años, que todos los días madruga para ir a La Sabana junto con su madre.

Pero en lugar de ir a entrenar, ella se mete a uno de los baños y empieza a sacar chunches, como globos, juguetes y otras chucherías que suelen venderse muy bien ahí.

Lea más: Fútbol femenino tico, vitrina prometedora para mercadeo deportivo

A lo lejos divisa un grupo de jóvenes, como ella, que también se levantan temprano, pero con un objetivo distinto: triunfar en el deporte. Entre ellas estaba Tannia.

Reflexionó sobre el sacrificio de la joven de los “chunches” y supo que también en el deporte, tenía que luchar y ser fuerte para sobrevivir.

Empezó muy niña en el atletismo. Con menos de cuatro años se ganó su primera medalla en una carrera en una calle del Barrial de Heredia, y descubrió un talento para los deportes que se confirmó en la Escuela Deportiva de la Universidad Nacional.

Le entró con todo al atletismo competitivo, representó a Heredia en Juegos Nacionales, al país en dos centroamericanos juveniles y se cargó de medallas.

Lea más: Ojalá el futbol masculino fuera más como el femenino

Pero un buen día decidió que su pasión era el fútbol y cambió de disciplina al cumplir los 15 años.

La fichó el Arenal Coronado y luego el Deportivo Saprissa… todo parecía ir muy bien.

Pero cuando llegó a primera división con el Saprissa, como que algo no funcionó. Talento y ganas no le faltaban, pero si mentores que le ayudaran a mejorar sus destrezas.

Y tuvo que soportar semanas completas de entrenamientos, pero nunca la llamaron ni siquiera para estar en la reserva. Parecía que no pertenecía al equipo y le rompían la ilusión.

Un día cambiaron al técnico, la vio un par de entrenamientos y concluyó que no era lo que necesitaba. Ese entrenador no duró ni un mes en el Saprissa.

Con semejante decepción, Tannia pensó seriamente en dejar el fútbol. Pero un día, a regañadientes, aceptó una oportunidad en Dimas Escazú con la segunda división y se convirtió en una de las goleadoras del campeonato, incluso convirtiendo tres hat tricks consecutivos.

Dimas la asciende a la primera división y Tannia debuta contra el Saprissa, 30 meses después de su último juego con las moradas. Se “jala” un partidazo, de esos con sabor a revancha y derrotan al Saprissa.

El Gran Premio vino después, cuando le llegó la confirmación de Angelina College, en Texas, de que fue aceptada para integrar el equipo de fútbol con una beca deportiva.

Tannia viajó a Texas, el sacrificio valió la pena y el sueño que se trazó de niña por fin sería realidad.

gpandolfo@larepublica.net








© 2024 Republica Media Group todos los derechos reservados.