El poder del reciclaje
Redacción La República redaccion@larepublica.net | Miércoles 23 enero, 2008
Las montañas de basura saturan a todos los cantones, las aceras de los distintos barrios están llenas de bolsas de desechos, los rellenos sanitarios ya no dan abasto con el material que reciben.
Mientras que en otros países la basura se ha convertido en toda una fuente de riqueza, en Costa Rica su tratamiento se les ha salido de las manos tanto a quienes la producen como a los que la procesan y hasta a las mismas autoridades.
De continuar el descontrol, la propia ministra de Salud, María Luisa Avila, advierte que el país se expone a epidemias de leptospirosis o dengue.
La posibilidad de que el problema siga creciendo es latente, dada la falta de capacidad de los rellenos para atenderlo y la falta de alternativas a corto plazo para depositar los residuos.
En nuestro “paraíso natural” se producen cerca de 11.764 toneladas diarias de desechos sólidos, de los cuales en el área metropolitana se recoge el 56%.
De los residuos que llegan a los rellenos sanitarios, se estima que entre el 60% y el 80% bien podrían volver a emplearse.
Sin embargo, son pocas las familias y comunidades que tienen iniciativas para el aprovechamiento de los residuos.
Lamentablemente en Costa Rica hasta el momento el reciclaje es aprovechado solo por algunas empresas, las cuales con acierto han creado programas que a la vez les permiten tener una proyección social.
Sin embargo, detrás del aprovechamiento responsable de los desechos hay una serie de ventajas que deben empezar a comprenderse y difundirse más entre la población para que así se convenza y empiece a tener estas prácticas tanto en sus casas como en los lugares de trabajo.
Además de reducir el volumen de los residuos sólidos, con el reciclaje se logra bajar los costos de recolección, ahorrar energía, conservar el ambiente, remuneración económica, obtente materia prima en la manufactura de productos nuevos, entre otros beneficios.
Estas bondades son aprovechadas desde años atrás por economías desarrolladas mientras, que el Ministerio de Salud local apenas anuncia la elaboración de un Plan Nacional de Residuos Sólidos.
Una tarea que evidentemente debió emprenderse hace mucho tiempo atrás, antes de que la basura nos llegara hasta el cuello.