El agua en la gastronomía II
| Viernes 08 mayo, 2009
El agua en la gastronomía II
Darle más espacio al agua era lo correcto. En estos momentos, cuando el universo nos dice a gritos que debemos regresar a lo básico, ¿qué más elemental que este líquido?
No nos extraña pues encontrar otro libro titulado “El agua en la cocina del futuro”, editado por la Academia Española de Gastronomía y que cuenta con 56 recetas realizadas por los más prestigiosos cocineros españoles y nueve combinaciones de bebidas.
En el volumen se incluyen, además, diversos estudios y tratados sobre la importancia del agua en la nutrición.
Todas las recetas y cocteles han sido realizados con agua embotellada de Vichy Catalán, elegida como la mejor para cocinar en una cata ciega realizada previamente.
El volumen fue presentado en San Sebastián por Federico Lipperheide, presidente de la Academia Vasca de Gastronomía, quien recomendó beber agua mineral natural durante las comidas para “poder separar y apreciar los distintos sabores”.
Lipperheide defendió la necesidad de que el vino y el agua compartan habitualmente la mesa.
Explicó que mientras el vino debe tomarse durante la degustación de los platos, el agua mineral natural “produce una limpieza en la boca” que la hace imprescindible para separar y distinguir unos sabores de otros. (Recomiendo ampliar este principio a otras bebidas) Lipperheide aseguró que para cumplir esta función son “mucho más eficaces las aguas carbonatadas”, las cuales han sido elegidas por los expertos en diferentes catas.
El presidente de la Academia Vasca de Gastronomía subrayó asimismo la importancia de usar este tipo de aguas minerales embotelladas en la elaboración de platos, frente al agua del grifo (agua del tubo como llamamos en Costa Rica), que, por motivos de salubridad, incorpora diversas sustancias que han provocado “la pérdida de su calidad gustativa”.
Por ello, abogó por utilizarlas en la cocina, pues, además de que “permiten reproducir con mayor fidelidad las recetas originales”, proporcionan “una mayor esponjosidad” a muchos alimentos.
El libro “El agua en la cocina del futuro” cuenta con las colaboraciones de expertos en nutrición, además de las 56 recetas de cualificados chefs y los nueve cocteles, recoge la historia del agua Vichy Catalán y un amplio resumen de sus características como agua para beber o como elemento para cocinar.
¡Volvamos al agua entre sorbo y sorbo!
¡Buen provecho y hasta la próxima semana!
Darle más espacio al agua era lo correcto. En estos momentos, cuando el universo nos dice a gritos que debemos regresar a lo básico, ¿qué más elemental que este líquido?
No nos extraña pues encontrar otro libro titulado “El agua en la cocina del futuro”, editado por la Academia Española de Gastronomía y que cuenta con 56 recetas realizadas por los más prestigiosos cocineros españoles y nueve combinaciones de bebidas.
En el volumen se incluyen, además, diversos estudios y tratados sobre la importancia del agua en la nutrición.
Todas las recetas y cocteles han sido realizados con agua embotellada de Vichy Catalán, elegida como la mejor para cocinar en una cata ciega realizada previamente.
El volumen fue presentado en San Sebastián por Federico Lipperheide, presidente de la Academia Vasca de Gastronomía, quien recomendó beber agua mineral natural durante las comidas para “poder separar y apreciar los distintos sabores”.
Lipperheide defendió la necesidad de que el vino y el agua compartan habitualmente la mesa.
Explicó que mientras el vino debe tomarse durante la degustación de los platos, el agua mineral natural “produce una limpieza en la boca” que la hace imprescindible para separar y distinguir unos sabores de otros. (Recomiendo ampliar este principio a otras bebidas) Lipperheide aseguró que para cumplir esta función son “mucho más eficaces las aguas carbonatadas”, las cuales han sido elegidas por los expertos en diferentes catas.
El presidente de la Academia Vasca de Gastronomía subrayó asimismo la importancia de usar este tipo de aguas minerales embotelladas en la elaboración de platos, frente al agua del grifo (agua del tubo como llamamos en Costa Rica), que, por motivos de salubridad, incorpora diversas sustancias que han provocado “la pérdida de su calidad gustativa”.
Por ello, abogó por utilizarlas en la cocina, pues, además de que “permiten reproducir con mayor fidelidad las recetas originales”, proporcionan “una mayor esponjosidad” a muchos alimentos.
El libro “El agua en la cocina del futuro” cuenta con las colaboraciones de expertos en nutrición, además de las 56 recetas de cualificados chefs y los nueve cocteles, recoge la historia del agua Vichy Catalán y un amplio resumen de sus características como agua para beber o como elemento para cocinar.
¡Volvamos al agua entre sorbo y sorbo!
¡Buen provecho y hasta la próxima semana!