Dinero para arreglar vías en picada
Esteban Arrieta earrieta@larepublica.net | Lunes 28 marzo, 2011
Descenso se debe a cambios en la recaudación del impuesto a la gasolina
Dinero para arreglar vías en picada
Cada año la cantidad de recursos destinada a la construcción y conservación de carreteras disminuye al menos en ¢10 mil millones desde 2009
Pese a que muchas de las carreteras y puentes nacionales requieren una atención inmediata debido a su mal estado, el Consejo Nacional de Vialidad (Conavi) invierte cada vez menos dinero en mantenimiento, reparación y construcción de esas infraestructuras.
El dinero asignado a esas labores se ha reducido en promedio un 12% cada año desde 2009 a la fecha, pese a que cada vez hay más huecos y el país pierde competitividad aceleradamente frente a otros de la región con mejor infraestructura.
La reducción en el presupuesto del Conavi es consecuencia de que esa institución se financia con ingresos que no son fijos, explicó Francisco Jiménez, ministro de Obras Públicas y Transportes.
“El mantenimiento y construcción de vías se autofinancian principalmente de los impuestos al derecho de circulación y la gasolina, por lo que este presupuesto puede variar de un año a otro. Asimismo, el plan de gastos anual del Conavi incluye la aprobación de préstamos por parte de la Asamblea Legislativa para construir infraestructura principalmente y eso también es cambiante”, expresó Jiménez.
La forma de financiamiento del Conavi le genera mucha preocupación, debido a que es una institución que realiza una labor muy sensible y pese a ello, sus recursos pueden variar entre un año y otro, agregó el Ministro.
Para 2009, el Conavi tenía un presupuesto de ¢147 mil millones, mientras que el año pasado los recursos ascendieron a ¢138 mil millones. Para 2011, el plan de gastos es por ¢128 mil millones.
“Por ejemplo, si el crudo se dispara a nivel mundial, cobraremos más impuestos. Lo que tenemos que reconocer es que por falta de dinero se dejan de hacer muchas cosas importantes”, añadió Jiménez.
El descenso en los recursos para el mantenimiento, reparación y construcción de vías es calificado como preocupante por la Cámara Nacional de Turismo (Canatur).
La forma como se financia el Conavi debe ser tema de análisis ya que los fondos que se recaudan entran a la caja única del Estado y al final, estos no se trasladan.
“Consideramos que la merma en los recursos del Conavi representa un revés en las necesidades de desarrollo que tanto urgen en Costa Rica. Es lamentable que desde hace varios años, el tema de la infraestructura vial sea señalamiento continuo como uno de nuestros problemas y que el Gobierno no tome una posición fuerte para actuar y aún así, más bien el presupuesto del Conavi esté siendo recortado”, concluyó Juan Carlos Ramos, presidente de Canatur.
Pese a la falta de recursos con la que contará este año, el Gobierno pretende iniciar la construcción de la nueva carretera de 27 kilómetros entre Bajos de Chilamate en Sarapiquí y Vuelta de Kooper en San Carlos.
Cuando se construya, esa vía se convertirá en una ruta alternativa para acceder al Caribe y de esta forma, reducir el tiempo de viaje entre la Gran Area Metropolitana y la Zona Atlántica. El cartel de licitación quedó listo la semana pasada.
Los recursos para la construcción de la vía provienen de un préstamo de $52 millones aprobado por la Asamblea Legislativa.
Esteban Arrieta
earrieta@larepublica.net
Dinero para arreglar vías en picada
Cada año la cantidad de recursos destinada a la construcción y conservación de carreteras disminuye al menos en ¢10 mil millones desde 2009
Pese a que muchas de las carreteras y puentes nacionales requieren una atención inmediata debido a su mal estado, el Consejo Nacional de Vialidad (Conavi) invierte cada vez menos dinero en mantenimiento, reparación y construcción de esas infraestructuras.
El dinero asignado a esas labores se ha reducido en promedio un 12% cada año desde 2009 a la fecha, pese a que cada vez hay más huecos y el país pierde competitividad aceleradamente frente a otros de la región con mejor infraestructura.
La reducción en el presupuesto del Conavi es consecuencia de que esa institución se financia con ingresos que no son fijos, explicó Francisco Jiménez, ministro de Obras Públicas y Transportes.
“El mantenimiento y construcción de vías se autofinancian principalmente de los impuestos al derecho de circulación y la gasolina, por lo que este presupuesto puede variar de un año a otro. Asimismo, el plan de gastos anual del Conavi incluye la aprobación de préstamos por parte de la Asamblea Legislativa para construir infraestructura principalmente y eso también es cambiante”, expresó Jiménez.
La forma de financiamiento del Conavi le genera mucha preocupación, debido a que es una institución que realiza una labor muy sensible y pese a ello, sus recursos pueden variar entre un año y otro, agregó el Ministro.
Para 2009, el Conavi tenía un presupuesto de ¢147 mil millones, mientras que el año pasado los recursos ascendieron a ¢138 mil millones. Para 2011, el plan de gastos es por ¢128 mil millones.
“Por ejemplo, si el crudo se dispara a nivel mundial, cobraremos más impuestos. Lo que tenemos que reconocer es que por falta de dinero se dejan de hacer muchas cosas importantes”, añadió Jiménez.
El descenso en los recursos para el mantenimiento, reparación y construcción de vías es calificado como preocupante por la Cámara Nacional de Turismo (Canatur).
La forma como se financia el Conavi debe ser tema de análisis ya que los fondos que se recaudan entran a la caja única del Estado y al final, estos no se trasladan.
“Consideramos que la merma en los recursos del Conavi representa un revés en las necesidades de desarrollo que tanto urgen en Costa Rica. Es lamentable que desde hace varios años, el tema de la infraestructura vial sea señalamiento continuo como uno de nuestros problemas y que el Gobierno no tome una posición fuerte para actuar y aún así, más bien el presupuesto del Conavi esté siendo recortado”, concluyó Juan Carlos Ramos, presidente de Canatur.
Pese a la falta de recursos con la que contará este año, el Gobierno pretende iniciar la construcción de la nueva carretera de 27 kilómetros entre Bajos de Chilamate en Sarapiquí y Vuelta de Kooper en San Carlos.
Cuando se construya, esa vía se convertirá en una ruta alternativa para acceder al Caribe y de esta forma, reducir el tiempo de viaje entre la Gran Area Metropolitana y la Zona Atlántica. El cartel de licitación quedó listo la semana pasada.
Los recursos para la construcción de la vía provienen de un préstamo de $52 millones aprobado por la Asamblea Legislativa.
Esteban Arrieta
earrieta@larepublica.net