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Costos aquejan a constructores

María Cisneros redaccion@larepublica.net | Lunes 24 junio, 2013


El año pasado las familias solicitaron en mayor medida un bono para realizar una construcción en lote propio o comprar su vivienda, explicó Eugenia Meza, gerente general de Mucap. Gerson Vargas/La República


Afecta en todos los estratos

Costos aquejan a constructores

Implementación de Código Eléctrico encareció desarrollos

El presupuesto que usted debe preparar para comprar o construir una casa subió en el último año por nuevas exigencias en la construcción.

Afecta en todos los estratos, y de hecho, también redujo en mil la cantidad de personas que recibieron bono de vivienda entre finales de 2012 e inicios de este año por encarecimiento en costos.
Nuevos requisitos como el Código Eléctrico y una mayor solicitud de bonos de vivienda para discapacitados y adultos mayores influyeron.
Finalizar con mejores números es la meta del Banhvi para este año, aunque para ello tendría que triplicar las cifras que hay hasta el momento y así sobrepasar la caída del año anterior.
En 2012, la inversión y los bonos tramitados disminuyeron.
Mientras mil bonos menos llegaron a los hogares costarricenses, la inversión del Estado cayó unos ¢5 mil millones.
La llegada del nuevo Código Eléctrico, que entró en vigencia en agosto del año anterior, fue una de las medidas que incentivaron la menor entrega de bonos de vivienda.
Esta disposición obliga a utilizar materiales más seguros y de mayor calidad en las instalaciones eléctricas de las viviendas, lo que aseguraría un menor riesgo de incendios.
Lo anterior implica un mayor costo para el desarrollo del hogar, por lo que obligó a incrementar el monto del bono entregado para una vivienda, explicó Juan de Dios Rojas, gerente general del Banhvi.
El monto mínimo de cada bono aumentó en ¢350 mil, lo que dividió aún más la inversión total del Estado para sus donaciones.
Para obtener un bono familiar de vivienda es necesario contar con un salario que oscile entre ¢218 mil y ¢1,3 millones; de acuerdo con el ingreso mensual de la familia se establece el monto que se otorgará. Tendrán prioridad aquellos hogares con ingresos más bajos.
Casi ¢6 millones es el monto máximo de esa donación que brinda el Estado a familias de escasos recursos económicos, personas con discapacidad y adultos mayores.
Ese dinero puede ser utilizado en la reparación del hogar y la construcción de vivienda, y es otorgado una única vez. La solicitud más frecuente es para construir en lote.
En tanto, la expectativa es cerrar este año con 10.200 bonos.
Para alcanzar esta cifra tendrían casi que triplicar los bonos tramitados hasta el momento, ya que para finales de mayo había solo unos 3.650 gestionados.

María Fernanda Cisneros
mcisneros@larepublica.net







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