Costa Rica en riesgo por falta de obra preventiva
Redacción La República redaccion@larepublica.net | Lunes 29 septiembre, 2008
Baja ejecución de presupuesto en Comisión Nacional de Emergencias pone en peligro a población frente a desastres
Costa Rica en riesgo por falta de obra preventiva
• Problema se arrastra desde 2007, cuando no se utilizó el 80% de los recursos contra vulnerabilidad
Pablo Mora
pmora@larepublica.net
Los daños que pueden ocasionar graves inundaciones durante lo que resta de la presente estación lluviosa, un terremoto de dimensiones similares a los de la década pasada, o la llegada de un huracán podrían ser mayores de los que cualquier costarricense imagina, debido a la falta de infraestructura y aplicación de presupuesto en programas preventivos.
Solo una cuarta parte del dinero que tenía asignado la Comisión Nacional de Emergencias (CNE) se ejecutó en el primer semestre de este año. Las obras comunitarias para la reducción de vulnerabilidad, sistemas de alerta temprana y equipamiento para la atención de desastres han quedado de lado.
En 2007 el porcentaje de subejecución alcanzó casi el 80% del presupuesto asignado. Esto expone al país a los efectos de las inclemencias del tiempo y el calentamiento global.
Las autoridades no parecen aplicar la máxima de “más vale prevenir que lamentar”. Esto por cuanto en vez de invertir en obras de contención para evitar que los fenómenos naturales afecten a la población, más bien se expone a altas inversiones para reparar los daños ocasionados por las tragedias.
Todo lo anterior se debe a un “débil control de la ejecución presupuestaria”, señala el informe de Evolución Fiscal y Presupuestaria del Sector Público, de la Contraloría General de la República (CGR).
Otro de los puntos oscuros es la poca ejecución de programas de prevención planteados para el primer semestre de este año.
Por ejemplo, para principio de año esta entidad se propuso realizar 10 proyectos en obras comunitarias para la reducción de vulnerabilidad, de los cuales todavía ninguno se realiza.
Caso similar ocurre en la creación de los tres sistemas de alerta temprana y de las cinco redes para el análisis de temas relacionados con riesgo. Del papel no pasaron.
Pero quizá lo más preocupante es que 25 comunidades del país todavía se encuentran a la espera de contar con su comité de emergencia, el cual se les había prometido desde el año pasado.
En suma, de un total de 98 proyectos de este tipo, solo 20 se ejecutaron en los primeros seis meses de este año.
La CNE se defiende al aducir que el exceso de trámites, las apelaciones a proyectos en concesión, los estudios de impacto ambiental y otra serie de factores que deben cumplirse antes de llevar a cabo un proyecto son los responsables de la subejecución.
“El dinero que teníamos asignado el año pasado para prevención se comenzó a utilizar en puentes, caminos y otros. Pero mucha de esa infraestructura se dañó, por lo que pasó a ser una emergencia en lugar de prevención y el dinero no se utilizó. Lo vamos a implementar en lo que resta del año”, justificó Daniel Gallardo, presidente de la CNE.
Costa Rica en riesgo por falta de obra preventiva
• Problema se arrastra desde 2007, cuando no se utilizó el 80% de los recursos contra vulnerabilidad
Pablo Mora
pmora@larepublica.net
Los daños que pueden ocasionar graves inundaciones durante lo que resta de la presente estación lluviosa, un terremoto de dimensiones similares a los de la década pasada, o la llegada de un huracán podrían ser mayores de los que cualquier costarricense imagina, debido a la falta de infraestructura y aplicación de presupuesto en programas preventivos.
Solo una cuarta parte del dinero que tenía asignado la Comisión Nacional de Emergencias (CNE) se ejecutó en el primer semestre de este año. Las obras comunitarias para la reducción de vulnerabilidad, sistemas de alerta temprana y equipamiento para la atención de desastres han quedado de lado.
En 2007 el porcentaje de subejecución alcanzó casi el 80% del presupuesto asignado. Esto expone al país a los efectos de las inclemencias del tiempo y el calentamiento global.
Las autoridades no parecen aplicar la máxima de “más vale prevenir que lamentar”. Esto por cuanto en vez de invertir en obras de contención para evitar que los fenómenos naturales afecten a la población, más bien se expone a altas inversiones para reparar los daños ocasionados por las tragedias.
Todo lo anterior se debe a un “débil control de la ejecución presupuestaria”, señala el informe de Evolución Fiscal y Presupuestaria del Sector Público, de la Contraloría General de la República (CGR).
Otro de los puntos oscuros es la poca ejecución de programas de prevención planteados para el primer semestre de este año.
Por ejemplo, para principio de año esta entidad se propuso realizar 10 proyectos en obras comunitarias para la reducción de vulnerabilidad, de los cuales todavía ninguno se realiza.
Caso similar ocurre en la creación de los tres sistemas de alerta temprana y de las cinco redes para el análisis de temas relacionados con riesgo. Del papel no pasaron.
Pero quizá lo más preocupante es que 25 comunidades del país todavía se encuentran a la espera de contar con su comité de emergencia, el cual se les había prometido desde el año pasado.
En suma, de un total de 98 proyectos de este tipo, solo 20 se ejecutaron en los primeros seis meses de este año.
La CNE se defiende al aducir que el exceso de trámites, las apelaciones a proyectos en concesión, los estudios de impacto ambiental y otra serie de factores que deben cumplirse antes de llevar a cabo un proyecto son los responsables de la subejecución.
“El dinero que teníamos asignado el año pasado para prevención se comenzó a utilizar en puentes, caminos y otros. Pero mucha de esa infraestructura se dañó, por lo que pasó a ser una emergencia en lugar de prevención y el dinero no se utilizó. Lo vamos a implementar en lo que resta del año”, justificó Daniel Gallardo, presidente de la CNE.