Conectados al mundo
Redacción La República redaccion@larepublica.net | Sábado 19 julio, 2008
El nuevo cable submarino del Pacífico permitiría incrementar la capacidad de transporte de datos vía Internet
Conectados al mundo
• Proyecto desarrollado por la multinacional Global Crossing tuvo una inversión de $33,5 millones
Carlos Jesús Mora
cmorah@larepublica.net
La cotidiana tranquilidad que se acostumbra respirar en la comunidad de Esterillos Este, se rompió este viernes. La llegada de lujosos vehículos —extraños en la zona— y una amplia comitiva llamaron la atención.
Desde el sábado de la semana pasada ya se percibía que algo extraordinario pasaba en la comunidad. Lo decía un amplio despliegue de seguridad en la zona, sin embargo, este prohibió presenciar un hecho tan relevante para su poblado como para el país en general.
En medio de una ceremonia privada —que cayó casi en el secreto— el Instituto Costarricense de Electricidad (ICE) inauguró este viernes su segundo cable submarino de fibra óptica, en el Pacífico del país.
A pesar de que la inauguración era sinónimo de que Costa Rica daba un paso hacia el desarrollo y que a partir de ese momento iba a poder estar en un mayor y mejor contacto con el mundo, la ceremonia se encerró en el formalismo, lo que impidió que los lugareños por más que se las ingeniaran pudieran darse cuenta de lo que pasaba.
Los vecinos solo sabían que en las instalaciones de la multinacional Global Crossing —desarrolladora del proyecto— estaba Oscar Arias, presidente de la República, pero no que una inyección de capital cercana a los $33,5 millones permitirá que Costa Rica pueda estar conectada a un sistema submarino que entrelaza las costas de Estados Unidos, México, Panamá, Venezuela e Islas Vírgenes, donde la desarrolladora del proyecto también tiene presencia.
De igual forma, tampoco nadie les dijo que el cable que se enterró en la playa de su localidad hace varios meses les permitiría a ellos y al país estar interconectados con otros países de Suramérica, Europa y Asia.
Los que sí lograron entrar al inmueble —presentando una acreditación que les daba el ICE por trabajar en la sucursal de la zona— se enteraron de que el proyecto brindaría el ancho de banda necesario para atender la demanda nacional de medios de comunicación y el uso de la Internet en el país.
De igual manera, ese número reducido de personas conoció que para el ICE el nuevo cable representa un incremento de la capacidad actual de un 30%.
“Inicialmente vamos a aumentar nuestra capacidad el equivalente a 756 sistemas de 2Mbps, esta misma capacidad también la disfrutarán los usuarios de Racsa, por lo que ahora se podrá acceder a una amplia gama de servicios y datos sin precedentes y en un menor tiempo”, dijo Pedro Pablo Quirós, presidente ejecutivo del ICE en su discurso.
A lo mejor por los parlantes los vecinos pidieron enterarse de que los usuarios nacionales de la red podrían ver incrementada la seguridad en la red, desde el punto de vista de sostenibilidad de la conexión.
“Por ser conexiones terrestres tienen un retardo de propagación mucho menor que el satélite, lo cual la hace ideal para la transmisión de señales digitales y para el desarrollo de nuevos servicios de banda ancha como multimedia”, dijo Ludwig Dillman, gerente de operaciones de Global Crossing en Costa Rica.
La estación del cable submarino del Pacífico está en Esterillos Este de Parrita, Puntarenas y fue bautizada bajo el nombre autóctono de Unqui.
El nuevo proyecto estará interconectado mediante un anillo interoceánico con la estación Bribri, primera de cableado submarino en el país ubicada en el Atlántico.
Conectados al mundo
• Proyecto desarrollado por la multinacional Global Crossing tuvo una inversión de $33,5 millones
Carlos Jesús Mora
cmorah@larepublica.net
La cotidiana tranquilidad que se acostumbra respirar en la comunidad de Esterillos Este, se rompió este viernes. La llegada de lujosos vehículos —extraños en la zona— y una amplia comitiva llamaron la atención.
Desde el sábado de la semana pasada ya se percibía que algo extraordinario pasaba en la comunidad. Lo decía un amplio despliegue de seguridad en la zona, sin embargo, este prohibió presenciar un hecho tan relevante para su poblado como para el país en general.
En medio de una ceremonia privada —que cayó casi en el secreto— el Instituto Costarricense de Electricidad (ICE) inauguró este viernes su segundo cable submarino de fibra óptica, en el Pacífico del país.
A pesar de que la inauguración era sinónimo de que Costa Rica daba un paso hacia el desarrollo y que a partir de ese momento iba a poder estar en un mayor y mejor contacto con el mundo, la ceremonia se encerró en el formalismo, lo que impidió que los lugareños por más que se las ingeniaran pudieran darse cuenta de lo que pasaba.
Los vecinos solo sabían que en las instalaciones de la multinacional Global Crossing —desarrolladora del proyecto— estaba Oscar Arias, presidente de la República, pero no que una inyección de capital cercana a los $33,5 millones permitirá que Costa Rica pueda estar conectada a un sistema submarino que entrelaza las costas de Estados Unidos, México, Panamá, Venezuela e Islas Vírgenes, donde la desarrolladora del proyecto también tiene presencia.
De igual forma, tampoco nadie les dijo que el cable que se enterró en la playa de su localidad hace varios meses les permitiría a ellos y al país estar interconectados con otros países de Suramérica, Europa y Asia.
Los que sí lograron entrar al inmueble —presentando una acreditación que les daba el ICE por trabajar en la sucursal de la zona— se enteraron de que el proyecto brindaría el ancho de banda necesario para atender la demanda nacional de medios de comunicación y el uso de la Internet en el país.
De igual manera, ese número reducido de personas conoció que para el ICE el nuevo cable representa un incremento de la capacidad actual de un 30%.
“Inicialmente vamos a aumentar nuestra capacidad el equivalente a 756 sistemas de 2Mbps, esta misma capacidad también la disfrutarán los usuarios de Racsa, por lo que ahora se podrá acceder a una amplia gama de servicios y datos sin precedentes y en un menor tiempo”, dijo Pedro Pablo Quirós, presidente ejecutivo del ICE en su discurso.
A lo mejor por los parlantes los vecinos pidieron enterarse de que los usuarios nacionales de la red podrían ver incrementada la seguridad en la red, desde el punto de vista de sostenibilidad de la conexión.
“Por ser conexiones terrestres tienen un retardo de propagación mucho menor que el satélite, lo cual la hace ideal para la transmisión de señales digitales y para el desarrollo de nuevos servicios de banda ancha como multimedia”, dijo Ludwig Dillman, gerente de operaciones de Global Crossing en Costa Rica.
La estación del cable submarino del Pacífico está en Esterillos Este de Parrita, Puntarenas y fue bautizada bajo el nombre autóctono de Unqui.
El nuevo proyecto estará interconectado mediante un anillo interoceánico con la estación Bribri, primera de cableado submarino en el país ubicada en el Atlántico.