Código Tecno: ¿Un espía dentro de tu celular?
Redacción La República redaccion@larepublica.net | Miércoles 04 mayo, 2011
¿Un espía dentro de tu celular?
Revuelo tras conocerse que Apple y Google guardan datos personales de los usuarios.
A medida que engorda este enorme cerebro global, crece la preocupación acerca de quién controla esta información. Toman fuerza distintos movimientos civiles destinados a proteger nuestra “privacidad” frente a la posible manipulación de estos datos por parte de gobiernos y de empresas.
La semana pasada se armó un gran revuelo en el mundo tecnológico cuando se conoció que el iPhone y algunos iPad (dos equipos de Apple) almacenan en un archivo secreto las “coordenadas espacio-temporales” de sus usuarios. En castellano, esos equipos van registrando, minuto a minuto, por dónde van sus dueños y guardan esa información en la memoria. ¿Para qué lo hacen?
Todavía nadie había contestado a esa pregunta, cuando se conoció un par de informaciones aun más inquietantes. Primero, no son solo los equipos de Apple los que registran los movimientos. Un especialista de seguridad, citado por el Wall Street Journal, demostró que los celulares con el sistema Android (de Google) también guardan esos datos.
Y no solo eso. La información personal es enviada por los equipos, en forma automática, a Apple y Google respectivamente, quienes la guardan en grandes bases de datos. El objetivo de tanto “espionaje” no sería otro que contar con información que les permitiría participar, desde una posición de privilegio, en el millonario mercado de los nuevos servicios basados en la "geolocalización", del cual Facebook también busca formar parte.
Se trata de marketing personalizado, basado en la posición que cada persona tiene a cada momento. La idea es que si uno está cerca de una cadena de hamburguesas X, el sistema le envíe automáticamente un aviso relacionado con ese local. Por ejemplo, el último combo de sándwich más papas fritas a mitad de precio. Este mercado mueve actualmente unos 2.900 millones de dólares al año y podría llegar a los 8.300 millones en 2014, según la consultora Gartner.
Antes que aclarar el panorama, las empresas aludidas se encargaron de oscurecerlo aun más. Google salió a decir que "para que los usuarios puedan compartir su localización en teléfonos Android es necesario que activen esta opción (no se activa por default)". Y que "cualquier información sobre localización que vuelve a los servidores de Google es anónima y no puede ser asociada a ningún usuario". Es decir, la función existe y los datos llegan a Google. El asunto es cómo.
Después, fue el mismísimo Steve Jobs, líder de Apple, quien abrió la boca. “Nosotros no rastreamos a nadie”, escribió en un mail que le contestó un lector del sitio MacRumors. Bien, estamos más tranquilos. Pero después agregó: “Android sí lo hace”. En un posterior comunicado, Apple insiste que no rastrean a la gente, aunque reconocen que usan un sistema que localiza cada iPhone.
Para que nada sea tan sencillo, los sitios especializados en tecnología recogieron versiones de que el sistema Windows Phone también recolectaría datos de ubicación geográfica. Así como Blackberry. Bingo, el cartón lleno.
La preocupación escala, en el Congreso de los Estados Unidos ya se está discutiendo el tema, mientras avanzan las primeras demandas judiciales contra Apple por parte de dueños de iPhones y iPads. Quizás sea un buen momento de “parar la pelota”, detener la histeria y ponernos a pensar cómo vincularnos seriamente en esta nueva sociedad de la información. Y tener siempre en cuenta que el eslabón más débil de esta cadena somos los usuarios, los que menos herramientas tenemos para defendernos.
Por Ricardo Braginski
rbraginski@larepublica.net