Logo La República

Domingo, 15 de diciembre de 2024



NACIONALES


Código Oficina: Dar malas noticias a los jefes

Melissa González mgonzalezt@larepublica.net | Jueves 23 febrero, 2012





Dar malas noticias a los jefes

Recuerde que la sinceridad siempre será recompensada

En los lugares de trabajo hay que dar tanto buenas noticias como malas; sin embargo, hacer lo primero muchos lo desean, mientras que cuando se trata de comunicar algo negativo no queda más que tomar un profundo respiro y valor.
Esto especialmente cuando hay que hablar con el jefe; como en todo, es necesario prepararse y anticiparse con soluciones para dejar una buena imagen.
Una de las recomendaciones antes de dar estas informaciones no tan alentadoras, es que garantice siempre tener la mejor comunicación con su jefe inmediato, además las malas noticias deben ser dadas por la persona responsable del problema a la mayor brevedad.
“No permita nunca que su jefe se entere por otros, o bien que se entere por casualidad o sorpresa. Procure siempre anticipar las situaciones, sobre todo cuando son manejos complejos, para que pueda transmitir bien a su superior los riesgos que está asumiendo y cómo los está manejando”, comentó Nelson Sibaja, director de Desarrollo Organizacional de Laboratorios Stein.
Otra de sus recomendaciones es que cuando dé la mala noticia vaya al grano, no haga drama, ni busque excusas; simple y sencillamente acepte si fue su responsabilidad, pero inmediatamente después haga saber cuál es el plan de mejora para evitar que se repita la situación.
“Si se trata de malas noticias por problemas reiterativos de la misma naturaleza, mejor reconozca que no sabe cómo manejarlo, su franqueza será mejor recompensada”, agregó.
En la actualidad en algunas empresas de Estados Unidos ya no es tan terrible dar las malas noticias, esto por que se ha estado tomando conciencia de un modelo llamado “una cultura sin miedo”, según explica el sitio cnnexpansion.com.
En el artículo se menciona la labor de la empresa Menlo Innovations, que precisamente destaca por capacitar a gestores para sonreír y agradecer a los empleados, incluso cuando traen malas noticias.
“En los corporativos de Estados Unidos, muchos empleados temen dar malas noticias porque esencialmente están diciendo ‘no’ a su jefe, informándole que un objetivo se incumplió. Pero las compañías que fomentan una cultura sin miedo gozan de una mejor toma de decisiones, un comportamiento más ético y la habilidad de dar un apoyo real al poder mental colectivo de la fuerza de trabajo”, dijo Rich Sheridan, presidente ejecutivo de Menlo, a ese medio.

Melissa González
mgonzalezt@larepublica.net






© 2024 Republica Media Group todos los derechos reservados.