Chistoso campeón
Redacción La República redaccion@larepublica.net | Lunes 28 enero, 2008
Chistoso campeón
El imitador y cuentachistes Novak Djokovic ganó el Abierto de Australia
Eduardo Baldares
ebaldares@larepublica.net
“Todavía los quiero, no se preocupen”, dijo sonriente el serbio Novak Djokovic a los australianos que llenaron el Melbourne Park para apoyar en su mayoría al francés Jo-Wilfred Tsonga.
¿Y cómo no se iba a reír quien acababa de ganar su primer Grand Slam, aún con el público en contra? ¿Cómo se va a estresar quien es capaz de hacer imitaciones mientras juega y además cuenta chistes en las conferencias de prensa? Seguro por eso no se derrumbó luego de perder el primer set, 4-6.
Por añadidura, el número tres del orbe se convirtió en el único serbio triunfante en un torneo del Grand Slam, al remontar en la final del Abierto de Australia la adversidad matemática ganando los tres parciales restantes, 6-4, 6-3 y 7-6 (2).
Acalambrado desde el comienzo del tercer set, y después de recibir masaje en el muslo izquierdo, Djokovic fue capaz de sacar el partido adelante, y alzar los brazos después de tres horas y seis minutos de lucha.
Tsonga, favorito de la afición por el carácter sorpresivo que le dio ni siquiera ser preclasificado, luchó con una solidez impropia de un advenedizo. No logró la victoria, pero al ganar un set impidió que Djokovic acabase el torneo imbatido, y que se diera la posibilidad de que tanto la emperatriz del certamen, la rusa María Sharapova, como el monarca masculino coincidieran en su triunfo sin ceder un parcial, hecho que todavía no ha sucedido en toda la historia del Grand Slam.
“Lo siento por mi inglés, creo que juego mejor que lo hablo”, dijo Tsonga en su discurso, “felicito a Novak por su gran lucha y gracias por el apoyo”, dijo dirigiéndose al público.
Jocoso como siempre, Djokovic se refirió a Tsonga como “Jo”, y lo felicitó así, “hiciste un torneo increíble y si hubieras ganado lo habrías merecido”. Acto seguido se dirigió al público: “No se preocupen, todavía los quiero. Estoy muy feliz de haber ganado mi primer Grand Slam aquí y ojalá pueda verlos aquí de nuevo en esta misma situación”, señaló quien será recordado no solo por ganar el torneo, sino por la imitación que hizo de la rusa María Sharapova en un partido previo.
Djokovic está feliz por la alegría que le está dando a sus compatriotas, tan golpeados por las guerras. “No puedo imaginar lo que está sucediendo en las calles de Belgrado y en todo mi país”, dijo, “es un país pequeño con poca tradición de tenis, pero ahora tenemos a Jankovic, Ivanovic, Zimonjic, Tipsarervic y la gente aprecia lo que estamos haciendo”.
Tsonga, instalado ahora entre los 20 mejores del mundo, señaló que no bajará la guardia y seguirá adelante. “No todo el mundo puede batir a los jugadores que yo he ganado. Conozco a Richard Gasquet, Mijail Youzhny y Rafael Nadal, todos son buenísimos, y derrotarlos me llena de confianza”.
Emperatriz
La rusa Maria Sharapova, quien ganó la final femenina por 7-5 y 6-3 a la serbia Ana Ivanovic, arribó a tres títulos del Grand Slam.
_ “Sé que he ganado tres grandes, pero no estoy aún en lo máximo de mi carrera. No creo que mi cuerpo se haya desarrollado ya al cien por cien”.
_ “Tengo muchas cosas que aprender en mi tenis, y otras muchas que construir y mejorar. Eso lleva su tiempo, no se hace en una noche”.
_ “Es algo que espero y no me importa las dificultades o días malos que tenga que pasar. Siempre que me levanto por la mañana pienso en ello cuando meto mi raqueta en la mochila. Siempre estoy deseando mejorar”.
El imitador y cuentachistes Novak Djokovic ganó el Abierto de Australia
Eduardo Baldares
ebaldares@larepublica.net
“Todavía los quiero, no se preocupen”, dijo sonriente el serbio Novak Djokovic a los australianos que llenaron el Melbourne Park para apoyar en su mayoría al francés Jo-Wilfred Tsonga.
¿Y cómo no se iba a reír quien acababa de ganar su primer Grand Slam, aún con el público en contra? ¿Cómo se va a estresar quien es capaz de hacer imitaciones mientras juega y además cuenta chistes en las conferencias de prensa? Seguro por eso no se derrumbó luego de perder el primer set, 4-6.
Por añadidura, el número tres del orbe se convirtió en el único serbio triunfante en un torneo del Grand Slam, al remontar en la final del Abierto de Australia la adversidad matemática ganando los tres parciales restantes, 6-4, 6-3 y 7-6 (2).
Acalambrado desde el comienzo del tercer set, y después de recibir masaje en el muslo izquierdo, Djokovic fue capaz de sacar el partido adelante, y alzar los brazos después de tres horas y seis minutos de lucha.
Tsonga, favorito de la afición por el carácter sorpresivo que le dio ni siquiera ser preclasificado, luchó con una solidez impropia de un advenedizo. No logró la victoria, pero al ganar un set impidió que Djokovic acabase el torneo imbatido, y que se diera la posibilidad de que tanto la emperatriz del certamen, la rusa María Sharapova, como el monarca masculino coincidieran en su triunfo sin ceder un parcial, hecho que todavía no ha sucedido en toda la historia del Grand Slam.
“Lo siento por mi inglés, creo que juego mejor que lo hablo”, dijo Tsonga en su discurso, “felicito a Novak por su gran lucha y gracias por el apoyo”, dijo dirigiéndose al público.
Jocoso como siempre, Djokovic se refirió a Tsonga como “Jo”, y lo felicitó así, “hiciste un torneo increíble y si hubieras ganado lo habrías merecido”. Acto seguido se dirigió al público: “No se preocupen, todavía los quiero. Estoy muy feliz de haber ganado mi primer Grand Slam aquí y ojalá pueda verlos aquí de nuevo en esta misma situación”, señaló quien será recordado no solo por ganar el torneo, sino por la imitación que hizo de la rusa María Sharapova en un partido previo.
Djokovic está feliz por la alegría que le está dando a sus compatriotas, tan golpeados por las guerras. “No puedo imaginar lo que está sucediendo en las calles de Belgrado y en todo mi país”, dijo, “es un país pequeño con poca tradición de tenis, pero ahora tenemos a Jankovic, Ivanovic, Zimonjic, Tipsarervic y la gente aprecia lo que estamos haciendo”.
Tsonga, instalado ahora entre los 20 mejores del mundo, señaló que no bajará la guardia y seguirá adelante. “No todo el mundo puede batir a los jugadores que yo he ganado. Conozco a Richard Gasquet, Mijail Youzhny y Rafael Nadal, todos son buenísimos, y derrotarlos me llena de confianza”.
Emperatriz
La rusa Maria Sharapova, quien ganó la final femenina por 7-5 y 6-3 a la serbia Ana Ivanovic, arribó a tres títulos del Grand Slam.
_ “Sé que he ganado tres grandes, pero no estoy aún en lo máximo de mi carrera. No creo que mi cuerpo se haya desarrollado ya al cien por cien”.
_ “Tengo muchas cosas que aprender en mi tenis, y otras muchas que construir y mejorar. Eso lleva su tiempo, no se hace en una noche”.
_ “Es algo que espero y no me importa las dificultades o días malos que tenga que pasar. Siempre que me levanto por la mañana pienso en ello cuando meto mi raqueta en la mochila. Siempre estoy deseando mejorar”.