Chip más pequeño se produce en el país
Redacción La República redaccion@larepublica.net | Martes 13 noviembre, 2007
Sesenta ingenieros nacionales de Intel ayudaron a crear el nuevo Penryn, el más diminuto del mundo
Chip más pequeño se produce en el país
• Proceso tardó más de tres años y se hizo en conjunto con Estados Unidos e Israel
Israel Aragón
iaragon@larepublica.net
Por primera vez en los diez años que tiene Intel en Costa Rica, un grupo de costarricenses participó en el diseño de la última línea de procesadores desarrollada por la compañía.
Se trata de la nueva línea de procesadores Penryn, la última arquitectura desarrollada por Intel, basada en la familia de procesadores Quad Core Xenon y que ayer fue lanzada en todo el mundo.
En su diseño trabajaron 60 ingenieros nacionales como parte de un equipo de 400 profesionales, entre quienes se incluían empleados de las plantas de Intel en Oregón y Arizona, Estados Unidos, e Israel, donde tradicionalmente se realizaba esta etapa del proceso de lanzamiento de nuevos productos.
“Se decidió hacer la inversión en el capital humano costarricense durante la etapa del diseño como parte de las iniciativas de la empresa por aumentar la participación en los procesos y por la probada capacidad de los ingenieros en el país”, afirmó Gastón Suárez, gerente de Introducción de Nuevos Productos de Intel.
Diseñar un procesador consiste en elaborar su “mapa”, trazar la trayectoria y ubicación de sus millones de transistores (dispositivos en que viajan los impulsos eléctricos que conforman el lenguaje binario) que lo compondrán, sus conexiones y cuántas capas tendrá, que son como los pisos a través de los cuales viajarán esos transistores.
“El papel de Costa Rica en este proceso ha sido estratégico. El talento y calidad en ingeniería y manufactura se ha ganado la confianza de la corporación”, dijo Suárez, quien agregó que esta primera experiencia fue “muy positiva”.
Penryn, la nueva generación de la familia de procesadores Core, es la de menor tamaño que existe en el mercado, pues la distancia entre sus transistores es de apenas 45 nanómetros (un milímetro equivale a un millón de nanómetros), cuando la de sus antecesores era de 65.
Esta menor distancia reduce el recorrido de los datos entre su punto de partida y destino, por lo que la velocidad de procesamiento de la información se ve incrementada.
En el caso de los procesadores Core Intel Xenon Procesor, nombre comercial de los Penryn, la velocidad se incrementa en un 35%, aseguró Suárez.
Ayer se lanzó el Quad Core Xenon Procesor, versión de cuatro núcleos, y se espera que en un mes esté disponible el Dual Core Xenon Procesor, versión con dos núcleos y por tanto con menor potencia.
La etapa en la que participaron los ingenieros ticos tardó más de tres años y precedió a la de ensamblaje y prueba, de la que desde un principio se encarga la planta en Costa Rica, lo que la convierte en la primera en producir unidades de 45 nanómetros.
También “ahorran un 38% de energía, lo que reduce en igual magnitud la generación de calor”, explicó Brandy Steinvorth, uno de los ingenieros costarricenses que participaron en el proyecto.
Los productos todavía no han llegado al país, pues habrá que esperar que de Estados Unidos, China o Australia lleguen a los distribuidores locales.
Chip más pequeño se produce en el país
• Proceso tardó más de tres años y se hizo en conjunto con Estados Unidos e Israel
Israel Aragón
iaragon@larepublica.net
Por primera vez en los diez años que tiene Intel en Costa Rica, un grupo de costarricenses participó en el diseño de la última línea de procesadores desarrollada por la compañía.
Se trata de la nueva línea de procesadores Penryn, la última arquitectura desarrollada por Intel, basada en la familia de procesadores Quad Core Xenon y que ayer fue lanzada en todo el mundo.
En su diseño trabajaron 60 ingenieros nacionales como parte de un equipo de 400 profesionales, entre quienes se incluían empleados de las plantas de Intel en Oregón y Arizona, Estados Unidos, e Israel, donde tradicionalmente se realizaba esta etapa del proceso de lanzamiento de nuevos productos.
“Se decidió hacer la inversión en el capital humano costarricense durante la etapa del diseño como parte de las iniciativas de la empresa por aumentar la participación en los procesos y por la probada capacidad de los ingenieros en el país”, afirmó Gastón Suárez, gerente de Introducción de Nuevos Productos de Intel.
Diseñar un procesador consiste en elaborar su “mapa”, trazar la trayectoria y ubicación de sus millones de transistores (dispositivos en que viajan los impulsos eléctricos que conforman el lenguaje binario) que lo compondrán, sus conexiones y cuántas capas tendrá, que son como los pisos a través de los cuales viajarán esos transistores.
“El papel de Costa Rica en este proceso ha sido estratégico. El talento y calidad en ingeniería y manufactura se ha ganado la confianza de la corporación”, dijo Suárez, quien agregó que esta primera experiencia fue “muy positiva”.
Penryn, la nueva generación de la familia de procesadores Core, es la de menor tamaño que existe en el mercado, pues la distancia entre sus transistores es de apenas 45 nanómetros (un milímetro equivale a un millón de nanómetros), cuando la de sus antecesores era de 65.
Esta menor distancia reduce el recorrido de los datos entre su punto de partida y destino, por lo que la velocidad de procesamiento de la información se ve incrementada.
En el caso de los procesadores Core Intel Xenon Procesor, nombre comercial de los Penryn, la velocidad se incrementa en un 35%, aseguró Suárez.
Ayer se lanzó el Quad Core Xenon Procesor, versión de cuatro núcleos, y se espera que en un mes esté disponible el Dual Core Xenon Procesor, versión con dos núcleos y por tanto con menor potencia.
La etapa en la que participaron los ingenieros ticos tardó más de tres años y precedió a la de ensamblaje y prueba, de la que desde un principio se encarga la planta en Costa Rica, lo que la convierte en la primera en producir unidades de 45 nanómetros.
También “ahorran un 38% de energía, lo que reduce en igual magnitud la generación de calor”, explicó Brandy Steinvorth, uno de los ingenieros costarricenses que participaron en el proyecto.
Los productos todavía no han llegado al país, pues habrá que esperar que de Estados Unidos, China o Australia lleguen a los distribuidores locales.