Chavistas marcharon a favor de reforma
| Lunes 05 noviembre, 2007
Consejo electoral suspendió propaganda en contra de cambios constitucionales
Chavistas marcharon a favor de reforma
• Gobierno califica a grupos opositores de minoría y los acusa de tratar de desestabilizar el país
Caracas
EFE
Miles de seguidores del presidente venezolano, Hugo Chávez, efectuaron ayer una marcha en favor de la reforma constitucional impulsada por el gobernante como vía para acelerar la instauración del socialismo en el país.
Con camisas y gorras rojas, el color de la "revolución bolivariana", y pancartas con el "sí" a la reforma, los "chavistas" se reunían en tres puntos de una gran avenida del este de Caracas, para luego partir hacia la céntrica avenida Bolívar.
El gobierno venezolano reiteró que enfrentará con "contundencia" a los sectores "minoritarios" de oposición que pretenden "desestabilizar" el país en un intento por empañar el proceso de referendo.
En el marco de una multitudinaria marcha oficialista en Caracas, el vicepresidente venezolano, Jorge Rodríguez, vinculó los hechos de violencia registrados en los últimos días en el marco de protestas estudiantiles con supuestos planes "desestabilizadores" de sectores que se oponen a la celebración del referendo sobre la reforma.
"Aún cuando son una minoría, queremos decirles que no se atrevan a perturbar la paz, a afectar el normal devenir del proceso democrático, porque se van a encontrar a todo el pueblo grande que apoya la democracia y al comandante Hugo Chávez", afirmó Rodríguez.
En los últimos días, protestas callejeras de grupos de estudiantes universitarios en rechazo a la reforma constitucional terminaron en escaramuzas con la policía que dejaron con heridas leves tanto a manifestantes como a agentes policiales.
El vicepresidente participó, junto al gabinete ejecutivo y líderes oficialistas, en una "gran marcha" en favor del "sí" a la reforma constitucional en el referendo, que ha sido convocado para el próximo 2 de diciembre por el Consejo Nacional Electoral (CNE).
La multitudinaria "marea roja" congregada en Caracas, que abrió la campaña oficialista de cara a la consulta sobre la reforma, es "otra demostración" de que el "sí vencerá" en la consulta, sostuvo Rodríguez en declaraciones a medios estatales.
La actividad constituye el primer acto oficialista de la campaña por el referendo que declaró abierta la noche del viernes CNE. La entidad electoral recibió, el viernes pasado, de manos del Parlamento oficialista, el proyecto de reforma de 69 de los 350 artículos de la Carta Magna de 1999, y las autoridades electorales convocaron para el próximo 2 de diciembre al referendo popular sobre la materia.
El pasado 15 de agosto, Chávez presentó ante la Asamblea Nacional (AN), de 167 miembros, todos oficialistas, un proyecto de reforma de 33 artículos que fue ampliado a 69 por los diputados.
El jefe de Estado y sus aliados defienden la reforma con el argumento de que reforzará el proyecto "revolucionario" de instaurar el sistema socialista en Venezuela, quinto exportador mundial de crudo.
Los partidos políticos de oposición, la cúpula empresarial y de comerciantes y el Episcopado rechaza los cambios constitucionales por considerar que "acaba con la democracia", otorga poderes "imperiales" a Chávez y lo "eterniza" en el poder, que asumió por vez primera en febrero de 1999.
Entre los artículos más polémicos del proyecto están la reelección indefinida presidencial y la posibilidad de que el Estado restrinja la información y suspenda el derecho al debido proceso durante los estados de excepción.
Chavistas marcharon a favor de reforma
• Gobierno califica a grupos opositores de minoría y los acusa de tratar de desestabilizar el país
Caracas
EFE
Miles de seguidores del presidente venezolano, Hugo Chávez, efectuaron ayer una marcha en favor de la reforma constitucional impulsada por el gobernante como vía para acelerar la instauración del socialismo en el país.
Con camisas y gorras rojas, el color de la "revolución bolivariana", y pancartas con el "sí" a la reforma, los "chavistas" se reunían en tres puntos de una gran avenida del este de Caracas, para luego partir hacia la céntrica avenida Bolívar.
El gobierno venezolano reiteró que enfrentará con "contundencia" a los sectores "minoritarios" de oposición que pretenden "desestabilizar" el país en un intento por empañar el proceso de referendo.
En el marco de una multitudinaria marcha oficialista en Caracas, el vicepresidente venezolano, Jorge Rodríguez, vinculó los hechos de violencia registrados en los últimos días en el marco de protestas estudiantiles con supuestos planes "desestabilizadores" de sectores que se oponen a la celebración del referendo sobre la reforma.
"Aún cuando son una minoría, queremos decirles que no se atrevan a perturbar la paz, a afectar el normal devenir del proceso democrático, porque se van a encontrar a todo el pueblo grande que apoya la democracia y al comandante Hugo Chávez", afirmó Rodríguez.
En los últimos días, protestas callejeras de grupos de estudiantes universitarios en rechazo a la reforma constitucional terminaron en escaramuzas con la policía que dejaron con heridas leves tanto a manifestantes como a agentes policiales.
El vicepresidente participó, junto al gabinete ejecutivo y líderes oficialistas, en una "gran marcha" en favor del "sí" a la reforma constitucional en el referendo, que ha sido convocado para el próximo 2 de diciembre por el Consejo Nacional Electoral (CNE).
La multitudinaria "marea roja" congregada en Caracas, que abrió la campaña oficialista de cara a la consulta sobre la reforma, es "otra demostración" de que el "sí vencerá" en la consulta, sostuvo Rodríguez en declaraciones a medios estatales.
La actividad constituye el primer acto oficialista de la campaña por el referendo que declaró abierta la noche del viernes CNE. La entidad electoral recibió, el viernes pasado, de manos del Parlamento oficialista, el proyecto de reforma de 69 de los 350 artículos de la Carta Magna de 1999, y las autoridades electorales convocaron para el próximo 2 de diciembre al referendo popular sobre la materia.
El pasado 15 de agosto, Chávez presentó ante la Asamblea Nacional (AN), de 167 miembros, todos oficialistas, un proyecto de reforma de 33 artículos que fue ampliado a 69 por los diputados.
El jefe de Estado y sus aliados defienden la reforma con el argumento de que reforzará el proyecto "revolucionario" de instaurar el sistema socialista en Venezuela, quinto exportador mundial de crudo.
Los partidos políticos de oposición, la cúpula empresarial y de comerciantes y el Episcopado rechaza los cambios constitucionales por considerar que "acaba con la democracia", otorga poderes "imperiales" a Chávez y lo "eterniza" en el poder, que asumió por vez primera en febrero de 1999.
Entre los artículos más polémicos del proyecto están la reelección indefinida presidencial y la posibilidad de que el Estado restrinja la información y suspenda el derecho al debido proceso durante los estados de excepción.