"Centroamérica existe"
Redacción La República redaccion@larepublica.net | Viernes 28 septiembre, 2007
“Centroamérica existe”
El cineasta Julio Hernández ganó tres premios por su película “Gasolina” en el Festival de Cine de San Sebastián
Melissa Arce
marce@larepublica.net
Asombro y alegría profunda despertó entre productores y realizadores centroamericanos el logro del cineasta guatemalteco Julio Hernández, quien obtuvo tres reconocimientos en el prestigioso Festival de Cine de San Sebastián con su filme “Gasolina”.
Más allá de ser solo motivo de orgullo para su país, Hernández comentó que estos reconocimientos implican que “Centroamérica existe y que sus historias pueden ser universales. También sirve como validación a un proyecto como Cinergia, ya que sin ese apoyo ‘Gasolina’ estaría todavía en la incubadora”.
“Gasolina” se llevó el premio “Cine en construcción de la industria”, que asegurará la finalización de la película y una mejor post-producción, con un presupuesto que oscilará entre 200 mil y 250 mil euros.
Además, el filme de Hernández se llevó también el premio Casa de América, dotado con 10 mil euros; y el premio CICAE (Confederación Internacional de Cines de Arte y Ensayo), que consiste en la distribución internacional de la película.
“Este logro representa que es posible hacer cine en Guatemala, que a pesar de la escasez de medios se puede hacer una película que conmueva a un público que posiblemente no sepa mayor cosa sobre el país”, con estas palabras resumía este joven la repercusión del premio en su vida como cineasta.
En palabras de Hernández, “Gasolina” trata sobre tres adolescentes que viajan sin rumbo en una auto y con poco combustible. En un trayecto que plantea que la amistad es una frontera entre la traición, la decepción y una solidaridad de rasgos ambivalentes cuando se es adolescente.
“También es una historia intimista que expone la noticia de un embarazo no planeado y cómo los pequeños momentos de sinceridad y de agobio son lo que definen una juventud y retratan un país”, contó el cineasta, quien ha sido jurado en la muestra joven La 240, cuya cuna es Costa Rica.
Tras estos reconocimientos podría haber una invitación al prestigioso Festival de Cannes, relató Hernández, además de una proyección que él nunca habría pensado.
El cineasta Julio Hernández ganó tres premios por su película “Gasolina” en el Festival de Cine de San Sebastián
Melissa Arce
marce@larepublica.net
Asombro y alegría profunda despertó entre productores y realizadores centroamericanos el logro del cineasta guatemalteco Julio Hernández, quien obtuvo tres reconocimientos en el prestigioso Festival de Cine de San Sebastián con su filme “Gasolina”.
Más allá de ser solo motivo de orgullo para su país, Hernández comentó que estos reconocimientos implican que “Centroamérica existe y que sus historias pueden ser universales. También sirve como validación a un proyecto como Cinergia, ya que sin ese apoyo ‘Gasolina’ estaría todavía en la incubadora”.
“Gasolina” se llevó el premio “Cine en construcción de la industria”, que asegurará la finalización de la película y una mejor post-producción, con un presupuesto que oscilará entre 200 mil y 250 mil euros.
Además, el filme de Hernández se llevó también el premio Casa de América, dotado con 10 mil euros; y el premio CICAE (Confederación Internacional de Cines de Arte y Ensayo), que consiste en la distribución internacional de la película.
“Este logro representa que es posible hacer cine en Guatemala, que a pesar de la escasez de medios se puede hacer una película que conmueva a un público que posiblemente no sepa mayor cosa sobre el país”, con estas palabras resumía este joven la repercusión del premio en su vida como cineasta.
En palabras de Hernández, “Gasolina” trata sobre tres adolescentes que viajan sin rumbo en una auto y con poco combustible. En un trayecto que plantea que la amistad es una frontera entre la traición, la decepción y una solidaridad de rasgos ambivalentes cuando se es adolescente.
“También es una historia intimista que expone la noticia de un embarazo no planeado y cómo los pequeños momentos de sinceridad y de agobio son lo que definen una juventud y retratan un país”, contó el cineasta, quien ha sido jurado en la muestra joven La 240, cuya cuna es Costa Rica.
Tras estos reconocimientos podría haber una invitación al prestigioso Festival de Cannes, relató Hernández, además de una proyección que él nunca habría pensado.