Cambio en la Fed acabaría con auge en los bonos
| Martes 28 agosto, 2007
Cambio en política de la Fed puede acabar con auge de los bonos
Nueva York -- El auge de los bonos a 30 años del Tesoro de Estados Unidos, la deuda pública más rentable del país en los últimos 15 meses, puede convertirse en una víctima de los intentos de la Reserva Federal de evitar que se extienda la crisis de liquidez.
Las rentabilidades de los llamados bonos largos aumentarán porque el presidente de la Fed, Ben S. Bernanke, puede bajar el coste de los créditos y con ello hacer que los precios al consumidor suban más rápidamente, dijo Brian Carlin, responsable de negociación de renta fija en JPMorgan Private Bank.
Los inversores pedirán una “mayor prima de riesgo”, dijo Carlin, que colabora en la gestión de una cartera de bonos de $100 mil millones en Nueva York. “Los recortes de la Fed pueden, efectivamente, ser casi inflacionarios”.
La contratación de futuros sobre fondos federales en la Chicago Board of Trade muestra que los operadores están seguros de que el banco central reducirá el tipo objetivo de los préstamos a un día en su reunión sobre política monetaria del mes próximo, tras un inesperado descenso del coste de financiación para los préstamos bancarios el pasado día 17.
Si bien la Fed ayudó a acabar con el desplome de la renta variable y la deuda de empresas, la medida del banco central avivó el temor de los que invierten en la deuda del Tesoro de más largo plazo. El movimiento de la Fed indicó que por primera vez en más de un año, la lucha contra la inflación ya no era su principal objetivo. La Fed, en un comunicado, dijo que había aumentado “notablemente” el riesgo al que la economía se halla expuesta por el colapso del mercado de las hipotecas de alto riesgo.
Carlin recomienda comprar deuda de dos a tres años y evitar el bono más largo porque la rentabilidad de éste puede subir hasta 5,25% para finales de año, desde un 4,89% la semana pasada.
El bono soberano a 5% y con vencimiento en mayo de 2037 subió 1 28/32 la semana pasada, o $18,75 por cada $1 mil de valor nominal, a 101 26/32 en Nueva York, según el operador de bonos Cantor Fitzgerald LP. Ayer cayó 8/32, situándose la rentabilidad en el 4,90%.
La inflación erosiona el valor de los pagos de la renta fija, así que los inversores suelen hacer subir los rendimientos cuando esperan que la inflación aumente. El bono a 30 años rinde cerca del 3% tras restar la inflación. La rentabilidad real ha sido de promedio del 2,65% desde que la Fed empezó a decir en mayo de 2006 que el control de los precios era su principal objetivo.
Los bonos a 30 años han rendido un 10,8% desde mayo de 2006, incluidos los intereses reinvertidos, mientras que los bonos a 10 años han pagado un 9,4% y los de a dos años han rentado un 7,2%, según datos de Merrill Lynch & Co.
La Fed está ahora “encargándose de este asunto de la potencial ruptura del mercado financiero', dijo Derek Brown, un gestor de fondos en Transamerica Investment Management, en Los Ángeles, que supervisa $8 mil millones en activos de renta fija. “Tienen que cambiar su enfoque, que hasta ahora ha sido combatir la inflación”.
El hincapié de la Fed en contener la inflación aumentando los tipos de interés mantuvo las rentabilidades de la deuda del Tesoro a largo plazo por debajo de las de la deuda a corto plazo.
Aun cuando los responsables de la política monetaria no han subido los tipos de interés desde junio de 2006, han dicho tras cada junta posterior que el aumento de la inflación era un riesgo mayor que una desaceleración de la economía. Los inversores entendieron esto como que la Fed estaba dispuesta a restringir el crédito con tal de frenar los precios.
La Fed reiteró este mensaje el 7 de agosto. Apenas 10 días después, el banco central redujo el tipo de descuento en 0,5 puntos porcentuales al 5,75% y no mencionó la inflación. El diferencial entre los rendimientos a 2 y a 30 años se ha ampliado a 0,59 punto porcentual.
“Realmente vimos una marcha atrás de la Fed en el mensaje que estaba dando a los mercados sobre la lucha contra la inflación”, dijo Culin Lundgren, que gestiona $40 mil millones como responsable de renta fija institucional para RiverSource Institutional Advisors. “El mensaje al mercado era más favorable para los vencimientos largos hace un par de semanas”.
Nueva York -- El auge de los bonos a 30 años del Tesoro de Estados Unidos, la deuda pública más rentable del país en los últimos 15 meses, puede convertirse en una víctima de los intentos de la Reserva Federal de evitar que se extienda la crisis de liquidez.
Las rentabilidades de los llamados bonos largos aumentarán porque el presidente de la Fed, Ben S. Bernanke, puede bajar el coste de los créditos y con ello hacer que los precios al consumidor suban más rápidamente, dijo Brian Carlin, responsable de negociación de renta fija en JPMorgan Private Bank.
Los inversores pedirán una “mayor prima de riesgo”, dijo Carlin, que colabora en la gestión de una cartera de bonos de $100 mil millones en Nueva York. “Los recortes de la Fed pueden, efectivamente, ser casi inflacionarios”.
La contratación de futuros sobre fondos federales en la Chicago Board of Trade muestra que los operadores están seguros de que el banco central reducirá el tipo objetivo de los préstamos a un día en su reunión sobre política monetaria del mes próximo, tras un inesperado descenso del coste de financiación para los préstamos bancarios el pasado día 17.
Si bien la Fed ayudó a acabar con el desplome de la renta variable y la deuda de empresas, la medida del banco central avivó el temor de los que invierten en la deuda del Tesoro de más largo plazo. El movimiento de la Fed indicó que por primera vez en más de un año, la lucha contra la inflación ya no era su principal objetivo. La Fed, en un comunicado, dijo que había aumentado “notablemente” el riesgo al que la economía se halla expuesta por el colapso del mercado de las hipotecas de alto riesgo.
Carlin recomienda comprar deuda de dos a tres años y evitar el bono más largo porque la rentabilidad de éste puede subir hasta 5,25% para finales de año, desde un 4,89% la semana pasada.
El bono soberano a 5% y con vencimiento en mayo de 2037 subió 1 28/32 la semana pasada, o $18,75 por cada $1 mil de valor nominal, a 101 26/32 en Nueva York, según el operador de bonos Cantor Fitzgerald LP. Ayer cayó 8/32, situándose la rentabilidad en el 4,90%.
La inflación erosiona el valor de los pagos de la renta fija, así que los inversores suelen hacer subir los rendimientos cuando esperan que la inflación aumente. El bono a 30 años rinde cerca del 3% tras restar la inflación. La rentabilidad real ha sido de promedio del 2,65% desde que la Fed empezó a decir en mayo de 2006 que el control de los precios era su principal objetivo.
Los bonos a 30 años han rendido un 10,8% desde mayo de 2006, incluidos los intereses reinvertidos, mientras que los bonos a 10 años han pagado un 9,4% y los de a dos años han rentado un 7,2%, según datos de Merrill Lynch & Co.
La Fed está ahora “encargándose de este asunto de la potencial ruptura del mercado financiero', dijo Derek Brown, un gestor de fondos en Transamerica Investment Management, en Los Ángeles, que supervisa $8 mil millones en activos de renta fija. “Tienen que cambiar su enfoque, que hasta ahora ha sido combatir la inflación”.
El hincapié de la Fed en contener la inflación aumentando los tipos de interés mantuvo las rentabilidades de la deuda del Tesoro a largo plazo por debajo de las de la deuda a corto plazo.
Aun cuando los responsables de la política monetaria no han subido los tipos de interés desde junio de 2006, han dicho tras cada junta posterior que el aumento de la inflación era un riesgo mayor que una desaceleración de la economía. Los inversores entendieron esto como que la Fed estaba dispuesta a restringir el crédito con tal de frenar los precios.
La Fed reiteró este mensaje el 7 de agosto. Apenas 10 días después, el banco central redujo el tipo de descuento en 0,5 puntos porcentuales al 5,75% y no mencionó la inflación. El diferencial entre los rendimientos a 2 y a 30 años se ha ampliado a 0,59 punto porcentual.
“Realmente vimos una marcha atrás de la Fed en el mensaje que estaba dando a los mercados sobre la lucha contra la inflación”, dijo Culin Lundgren, que gestiona $40 mil millones como responsable de renta fija institucional para RiverSource Institutional Advisors. “El mensaje al mercado era más favorable para los vencimientos largos hace un par de semanas”.