Café Tacvba vibró
Redacción La República redaccion@larepublica.net | Lunes 09 marzo, 2009
Café Tacvba vibró
A pesar del frío la banda mexicana logró calentar la noche del sábado
Gabriela Morúa
gmorua@larepublica.net
Como se había establecido, eran las 7 p.m. y el concierto iba a comenzar, los teloneros Parque en el Espacio y Evolución subieron al escenario y tocaron lo suyo. Después de media hora de silencio con un apagón, justo a la 9.05 p.m., salieron los tacvbas. Su cantante Rubén Albarrán, con su típico sombrero, energía y estilo hizo vibrar al público desde el inicio con el nuevo tema “Seguir siendo”, del último disco “Sino”, que vinieron a promocionar, para seguir con la pieza “Tengo todo”, que creó una inmediata respuesta del público con cantos y gritos.
La iluminación también se apoderó del ritmo, con “Alarma de tos” un constante juego para los ojos. “El propósito de esta noche es echar mucho desmadre, todos somos uno. Así que bailen y canten”, dijo saludando Albarrán, quien rápidamente continuó cantando temas más conocidos, “Vámonos” y “Eo”. Otros éxitos que no podían faltar, “Las Flores” e “Ingrata”, de su incomparable segundo disco “Re” exaltaron aún más a su público. Un pequeño oeoeoeoe ticos ticos se escuchó al decir Albarrán cuánto le gustaba Costa Rica. Había pasado ya una hora y los presentes no podían dejar de brincar y aplaudir. Posteriormente, con “Déjate caer” llegó una de sus inconfundibles coreografías. Para despedirse y volver ante las súplicas del grupo, con “El baile y el salón” y diferentes peticiones del público. Aunque, la asistencia no fue la que se esperaba, el concierto fue ejemplar, durando casi tres horas.
A pesar del frío la banda mexicana logró calentar la noche del sábado
Gabriela Morúa
gmorua@larepublica.net
Como se había establecido, eran las 7 p.m. y el concierto iba a comenzar, los teloneros Parque en el Espacio y Evolución subieron al escenario y tocaron lo suyo. Después de media hora de silencio con un apagón, justo a la 9.05 p.m., salieron los tacvbas. Su cantante Rubén Albarrán, con su típico sombrero, energía y estilo hizo vibrar al público desde el inicio con el nuevo tema “Seguir siendo”, del último disco “Sino”, que vinieron a promocionar, para seguir con la pieza “Tengo todo”, que creó una inmediata respuesta del público con cantos y gritos.
La iluminación también se apoderó del ritmo, con “Alarma de tos” un constante juego para los ojos. “El propósito de esta noche es echar mucho desmadre, todos somos uno. Así que bailen y canten”, dijo saludando Albarrán, quien rápidamente continuó cantando temas más conocidos, “Vámonos” y “Eo”. Otros éxitos que no podían faltar, “Las Flores” e “Ingrata”, de su incomparable segundo disco “Re” exaltaron aún más a su público. Un pequeño oeoeoeoe ticos ticos se escuchó al decir Albarrán cuánto le gustaba Costa Rica. Había pasado ya una hora y los presentes no podían dejar de brincar y aplaudir. Posteriormente, con “Déjate caer” llegó una de sus inconfundibles coreografías. Para despedirse y volver ante las súplicas del grupo, con “El baile y el salón” y diferentes peticiones del público. Aunque, la asistencia no fue la que se esperaba, el concierto fue ejemplar, durando casi tres horas.