Brasil bajaría más las tasas por reducción de inflación
Bloomberg | Jueves 09 febrero, 2017
La inflación anual brasileña declinó en enero al menor nivel en cuatro años, lo que alimenta las apuestas a que el Banco Central mantendrá el enérgico ritmo de flexibilización monetaria durante más tiempo. Las tasas de permuta extendieron sus recientes declinaciones.
El Índice de Precios de Consumo Armonizado (IPCA), de referencia trepó un 0,38% en enero, el nivel más bajo registrado para el mes en una serie que se remonta a 1994.
Quedó por debajo de la mediana de los pronósticos de 48 analistas que consultó Bloomberg, que era del 0,42%.
Los precios al consumidor aumentaron un 5,35% en los 12 meses hasta enero, la menor cantidad desde setiembre de 2012 y la mitad del nivel de igual período del año anterior, informó el miércoles la oficina nacional de estadísticas.
La mayor economía de Latinoamérica continúa inmersa en la recesión y hasta octubre el Banco Central había mantenido los costos crediticios en el mayor nivel en más de diez años.
En momentos en que la inflación se desacelera con rapidez, las autoridades decidieron que había margen para triplicar el ritmo de la flexibilización el mes pasado, en parte para contribuir a dar impulso a una economía vacilante. Las estimaciones de inflación siguieron declinando después de la medida.
Los datos le permiten al Banco Central bajar la tasa Selic de referencia durante más tiempo, dijo André Perfeito, economista jefe de Gradual Cctvm, que estima que la tasa declinará al 9% para fin de año en comparación con su pronóstico anterior del 9,75%. “Cambio mi pronóstico. La inflación declina con rapidez”.
El Banco Central redujo la tasa Selic de referencia al 13% en enero luego de dos recortes de un cuarto de punto el año pasado y uno de 75 puntos básicos el mes pasado. Los economistas que encuestó el Banco Central la semana pasada estimaron que la tasa bajará al 9,5% para fin de año.
Los precios de alimentos y bebidas subieron un 0,35% luego de un incremento del 0,08% del mes anterior. La combinación de ese componente con el costo del transporte, que trepó un 0,77% debido al aumento de las tarifas de los autobuses, representó más de la mitad del incremento de los precios al consumidor en enero. Por otro lado, la inflación de los servicios se desaceleró de un 0,65% anterior a un 0,37%, según cálculos de Ibiuna Investimentos.
“Más que el índice IPCA, que fue muy bajo para los parámetros de enero, también la composición de los datos fue muy benigna”, dijo por teléfono Daniel Weeks, un economista de Garde Investimentos. “El Banco Central podría bajar la Selic al 9% y la tendencia de la tasa es descendente”.