Bolivia pide diálogo tras referendo
| Martes 12 agosto, 2008
Bolivia pide diálogo tras referendo
Sondeos dan como ratificados tanto al presidente Morales como a sus principales rivales
La Paz
EFE
Los llamamientos para que el Gobierno de Bolivia y la oposición abran un proceso de diálogo se intensificaron ayer tras el referendo revocatorio del domingo, en el que, a falta de resultados oficiales definitivos, los sondeos dan por ratificados a Morales y a sus principales rivales autonomistas.
La Corte Nacional Electoral (CNE) de Bolivia finalizará el recuento de votos dentro de siete o diez días, si bien ofreció ayer los primeros resultados parciales, que dan a Morales un apoyo del 52 por ciento con el 23 por ciento del escrutinio.
Este mismo cómputo “ratifica” a varios prefectos opositores como el de Tarija, Mario Cossío, con un 65 por ciento; al de Santa Cruz, Rubén Costas (69,5%); Beni, Ernesto Suárez (67%) y al de Pando, Leopoldo Fernández (66%).
A la espera de datos definitivos, en Bolivia se analizaba ayer el resultado del revocatorio con los sondeos a pie de urna ofrecidos por los medios de comunicación.
Según esos sondeos, Morales no estaría sólo ratificado sino que habría obtenido cerca de un 63 por ciento de apoyo, diez puntos más que el respaldo que cosechó en las elecciones de 2005.
Las encuestas dan asimismo continuidad a cinco de los ocho gobernadores sometidos a la consulta: los opositores de Santa Cruz, Beni, Pando y Tarija y al oficialista de Potosí, Mario Virreira.
Quedarían revocados según las encuestas, el prefecto oficialista de Oruro, Alberto Aguilar, y los opositores de La Paz, José Luis Paredes; y de Cochabamba, Manfred Reyes Villa, aunque éste último se niega a reconocer su derrota.
Un día después del referendo, en Bolivia se intensificaron los llamamientos para que Gobierno y oposición abran un escenario de diálogo sobre la crisis política, cuyo fondo es el choque frontal entre el proyecto de reforma constitucional de Morales y el plan autonomista de varias regiones lideradas por sus rivales políticos.
El ministro de la Presidencia, Juan Ramón Quintana, remarcó ayer en declaraciones al canal estatal de televisión la disposición de Morales a dialogar con los opositores, como el domingo anticipó el propio mandatario tras conocer los sondeos sobre el referendo.
Quintana no dio detalles sobre cómo se organizará, ni cuándo se convocará esa mesa de diálogo, pero reclamó a las partes en conflicto un “espíritu magnánimo” para dar vez certidumbre a la población que, según dijo, vive en “zozobra” permanente.
Agregó que si finalmente no es posible un “acuerdo sustantivo” las diferencias deberían dirimirse en 2009 en dos referendos sobre el proyecto de nueva Constitución, aunque éste es tajantemente rechazado por la oposición.
Varios analistas coincidieron ayer en que los bolivianos, con su voto, han expresado un mensaje claro que obliga a las partes, confrontadas desde 2006, a concertar el proyecto de Constitución del gobernante indígena con los estatutos autonómicos aprobados unilateralmente por las regiones de la denominada “media luna”.
De hecho, el propio Morales aseguró el domingo que la unión de los bolivianos se conseguirá “juntando la nueva Constitución Política del Estado con los estatutos autonómicos” desde el respeto a la legalidad.
A favor del diálogo entre Morales y sus opositores también se pronunció la misión de observadores enviada por la Organización de Estados Americanos (OEA) que afirmó ayer que los resultados de la consulta obligan a la clase política a “sentarse para llegar a acuerdos en los temas fundamentales del país”.
El jefe de la misión de la OEA y ex vicepresidente de Guatemala, Eduardo Stein, destacó la necesidad de que en los próximos días las partes establezcan “reglas claras para la negociación”.
En el mismo sentido se pronunció el partido opositor Poder Democrático y Social (Podemos), cuyo dirigente y senador, Tito Hoz de Vila, celebró el discurso conciliador a favor del diálogo realizado por Morales el domingo en la noche.
“Seríamos ciegos en no reconocer una victoria del presidente y en ese sentido ahora más que nunca, más que nunca, hay que sentarse a la mesa del diálogo y el primer paso lo tiene que dar el Gobierno”, dijo Hoz de Vila, cuyo partido controla el Senado.
Sin embargo, los líderes de la rica región oriental de Santa Cruz han planteado reparos al diálogo por la desconfianza, según dijeron, que tienen hacia las convocatorias del Gobierno de Morales.
El secretario de Autonomías de la Prefectura de Santa Cruz, Carlos Dabdoub, uno de los principales asesores del gobernador Costas, aseguró que su región “nunca se ha negado al diálogo”, pero hay una “falta de credibilidad en la palabra del Gobierno porque nunca ha cumplido”, dijo.
En declaraciones a Efe, Dabdoub dijo que Santa Cruz ha pedido, no solo diálogo con Morales, sino un “pacto de reconciliación nacional” con la mediación de la Unión Europea, la Organización de Estados Americanos y la Iglesia Católica, pero “nunca nos ha respondido”.
Sondeos dan como ratificados tanto al presidente Morales como a sus principales rivales
La Paz
EFE
Los llamamientos para que el Gobierno de Bolivia y la oposición abran un proceso de diálogo se intensificaron ayer tras el referendo revocatorio del domingo, en el que, a falta de resultados oficiales definitivos, los sondeos dan por ratificados a Morales y a sus principales rivales autonomistas.
La Corte Nacional Electoral (CNE) de Bolivia finalizará el recuento de votos dentro de siete o diez días, si bien ofreció ayer los primeros resultados parciales, que dan a Morales un apoyo del 52 por ciento con el 23 por ciento del escrutinio.
Este mismo cómputo “ratifica” a varios prefectos opositores como el de Tarija, Mario Cossío, con un 65 por ciento; al de Santa Cruz, Rubén Costas (69,5%); Beni, Ernesto Suárez (67%) y al de Pando, Leopoldo Fernández (66%).
A la espera de datos definitivos, en Bolivia se analizaba ayer el resultado del revocatorio con los sondeos a pie de urna ofrecidos por los medios de comunicación.
Según esos sondeos, Morales no estaría sólo ratificado sino que habría obtenido cerca de un 63 por ciento de apoyo, diez puntos más que el respaldo que cosechó en las elecciones de 2005.
Las encuestas dan asimismo continuidad a cinco de los ocho gobernadores sometidos a la consulta: los opositores de Santa Cruz, Beni, Pando y Tarija y al oficialista de Potosí, Mario Virreira.
Quedarían revocados según las encuestas, el prefecto oficialista de Oruro, Alberto Aguilar, y los opositores de La Paz, José Luis Paredes; y de Cochabamba, Manfred Reyes Villa, aunque éste último se niega a reconocer su derrota.
Un día después del referendo, en Bolivia se intensificaron los llamamientos para que Gobierno y oposición abran un escenario de diálogo sobre la crisis política, cuyo fondo es el choque frontal entre el proyecto de reforma constitucional de Morales y el plan autonomista de varias regiones lideradas por sus rivales políticos.
El ministro de la Presidencia, Juan Ramón Quintana, remarcó ayer en declaraciones al canal estatal de televisión la disposición de Morales a dialogar con los opositores, como el domingo anticipó el propio mandatario tras conocer los sondeos sobre el referendo.
Quintana no dio detalles sobre cómo se organizará, ni cuándo se convocará esa mesa de diálogo, pero reclamó a las partes en conflicto un “espíritu magnánimo” para dar vez certidumbre a la población que, según dijo, vive en “zozobra” permanente.
Agregó que si finalmente no es posible un “acuerdo sustantivo” las diferencias deberían dirimirse en 2009 en dos referendos sobre el proyecto de nueva Constitución, aunque éste es tajantemente rechazado por la oposición.
Varios analistas coincidieron ayer en que los bolivianos, con su voto, han expresado un mensaje claro que obliga a las partes, confrontadas desde 2006, a concertar el proyecto de Constitución del gobernante indígena con los estatutos autonómicos aprobados unilateralmente por las regiones de la denominada “media luna”.
De hecho, el propio Morales aseguró el domingo que la unión de los bolivianos se conseguirá “juntando la nueva Constitución Política del Estado con los estatutos autonómicos” desde el respeto a la legalidad.
A favor del diálogo entre Morales y sus opositores también se pronunció la misión de observadores enviada por la Organización de Estados Americanos (OEA) que afirmó ayer que los resultados de la consulta obligan a la clase política a “sentarse para llegar a acuerdos en los temas fundamentales del país”.
El jefe de la misión de la OEA y ex vicepresidente de Guatemala, Eduardo Stein, destacó la necesidad de que en los próximos días las partes establezcan “reglas claras para la negociación”.
En el mismo sentido se pronunció el partido opositor Poder Democrático y Social (Podemos), cuyo dirigente y senador, Tito Hoz de Vila, celebró el discurso conciliador a favor del diálogo realizado por Morales el domingo en la noche.
“Seríamos ciegos en no reconocer una victoria del presidente y en ese sentido ahora más que nunca, más que nunca, hay que sentarse a la mesa del diálogo y el primer paso lo tiene que dar el Gobierno”, dijo Hoz de Vila, cuyo partido controla el Senado.
Sin embargo, los líderes de la rica región oriental de Santa Cruz han planteado reparos al diálogo por la desconfianza, según dijeron, que tienen hacia las convocatorias del Gobierno de Morales.
El secretario de Autonomías de la Prefectura de Santa Cruz, Carlos Dabdoub, uno de los principales asesores del gobernador Costas, aseguró que su región “nunca se ha negado al diálogo”, pero hay una “falta de credibilidad en la palabra del Gobierno porque nunca ha cumplido”, dijo.
En declaraciones a Efe, Dabdoub dijo que Santa Cruz ha pedido, no solo diálogo con Morales, sino un “pacto de reconciliación nacional” con la mediación de la Unión Europea, la Organización de Estados Americanos y la Iglesia Católica, pero “nunca nos ha respondido”.