Bofetada a los nobles
Luis Fernado Rojas lrojas@larepublica.net | Lunes 28 junio, 2010
Bofetada a los nobles
Alemania pasa por encima de Inglaterra y ahora va por Argentina
Recuperando la vestimenta de favorito y de contundente que mostró en el primer partido ante Australia, Alemania dejó ayer en paños menores a los caballeros ingleses y los envió sonrojados y desilusionados a su país.
Alemania apostó por ser campeón, mientras Inglaterra tuvo en algunos momentos del partido destellos de esa selección que muchos esperábamos ver, pero que nunca arrancó y quizás cuando más se acercó, una decisión arbitral impidió que el equipo de Fabio Capello se procurara otro destino.
El partido fue intenso. Ofensiva a ultranza, derroche físico sin brusquedades (solo una tarjeta por bando), goles abundantes, alternativas en los dos frentes y disparos a la madera.
Los germanos arrancaron con la certeza de estar jugando la primera de las cuatro finales que lo podrían llevar a convertirse en el próximo campeón mundial. Los ingleses se lo tomaron con calma, pero con decisión, claros que en un duelo de “grandes” hay que comportarse a la altura.
Al 23’ se rompió el encanto, saque largo de puerta de Neuer, Klose ganó el forcejeo a Upson y, a media caída dentro del área, alargó la pierna derecha para batir a James en su salida.
Sí, el gol es el táctico del fútbol, el partido se abrió, Klose falló una al 30, pero Podolski, en hora buena ante tanto yerro en el último partido, entrando sin marcaje desde la izquierda, recogió un balón de Müller y batió por bajo a James.
El acorazado inglés se estaba hundiendo, solo era cuestión de tiempo, pero entonces un centro de Gerrard, y una salida un poquito más que pésima de Neuer permitió a Upson poner el 2 a 1. Inglaterra se la creyó y un minuto después un balazo de Lampard ¡Huy qué gol! pegó en la base del horizontal alemán picó adentro, bien adentro, pero rebotó hacia fuera y el portero la tomó, sacó, y los árbitros y guardalíneas avalaron la acción. Error para la historia.
Después de eso, el larguero volvió a cruzarse en la trayectoria de un remate directo por Lampard en el m.52. Milner disparó al cuerpo de Neuer en el 61. Inglaterra se embarcó en una audaz ofensiva. Arriesgó y perdió. Schweinsteiger condujo un contragolpe, sirvió a Müller, desmarcado, que fusiló a James en el 70. La retaguardia inglesa se desmoronó y los ataques germanos llegaban en oleadas ante James. Müller hizo su segundo y los utileros ingleses empezaron a sacar los trajes que los caballeros ingleses llevarían al aeropuerto.
Luis Rojas
lrojas@larepublica.net
Alemania pasa por encima de Inglaterra y ahora va por Argentina
Recuperando la vestimenta de favorito y de contundente que mostró en el primer partido ante Australia, Alemania dejó ayer en paños menores a los caballeros ingleses y los envió sonrojados y desilusionados a su país.
Alemania apostó por ser campeón, mientras Inglaterra tuvo en algunos momentos del partido destellos de esa selección que muchos esperábamos ver, pero que nunca arrancó y quizás cuando más se acercó, una decisión arbitral impidió que el equipo de Fabio Capello se procurara otro destino.
El partido fue intenso. Ofensiva a ultranza, derroche físico sin brusquedades (solo una tarjeta por bando), goles abundantes, alternativas en los dos frentes y disparos a la madera.
Los germanos arrancaron con la certeza de estar jugando la primera de las cuatro finales que lo podrían llevar a convertirse en el próximo campeón mundial. Los ingleses se lo tomaron con calma, pero con decisión, claros que en un duelo de “grandes” hay que comportarse a la altura.
Al 23’ se rompió el encanto, saque largo de puerta de Neuer, Klose ganó el forcejeo a Upson y, a media caída dentro del área, alargó la pierna derecha para batir a James en su salida.
Sí, el gol es el táctico del fútbol, el partido se abrió, Klose falló una al 30, pero Podolski, en hora buena ante tanto yerro en el último partido, entrando sin marcaje desde la izquierda, recogió un balón de Müller y batió por bajo a James.
El acorazado inglés se estaba hundiendo, solo era cuestión de tiempo, pero entonces un centro de Gerrard, y una salida un poquito más que pésima de Neuer permitió a Upson poner el 2 a 1. Inglaterra se la creyó y un minuto después un balazo de Lampard ¡Huy qué gol! pegó en la base del horizontal alemán picó adentro, bien adentro, pero rebotó hacia fuera y el portero la tomó, sacó, y los árbitros y guardalíneas avalaron la acción. Error para la historia.
Después de eso, el larguero volvió a cruzarse en la trayectoria de un remate directo por Lampard en el m.52. Milner disparó al cuerpo de Neuer en el 61. Inglaterra se embarcó en una audaz ofensiva. Arriesgó y perdió. Schweinsteiger condujo un contragolpe, sirvió a Müller, desmarcado, que fusiló a James en el 70. La retaguardia inglesa se desmoronó y los ataques germanos llegaban en oleadas ante James. Müller hizo su segundo y los utileros ingleses empezaron a sacar los trajes que los caballeros ingleses llevarían al aeropuerto.
Luis Rojas
lrojas@larepublica.net