Argentina reabrirá canje con acreedores
| Martes 30 septiembre, 2008
Argentina reabrirá canje con acreedores
Gobierno busca reestructurar la deuda en bonos públicos
Buenos Aires
EFE
Argentina anunció ayer que iniciará formalmente la puesta en marcha de una propuesta de tres bancos internacionales para reabrir la reestructuración de bonos públicos concretada en 2005 para aquellos acreedores privados que entonces no adhirieron a ese canje de deuda.
El jefe de Gabinete argentino, Sergio Massa, dijo en rueda de prensa que el Gobierno de su país resolvió poner en marcha el plan de refinanciación presentado por Barclays, Citigroup y Deutsche Bank, que contarían ya con la aceptación de tenedores de bonos por unos $7.500 millones, sobre un total de $20 mil millones que quedaron fuera del canje de hace tres años.
Tras una reunión con la presidenta argentina, Cristina Fernández, los responsables de las tres entidades firmaron ayer un acta acuerdo con el Gobierno argentino para formalizar el inicio del proceso.
Massa indicó que se iniciará el próximo jueves una etapa de análisis técnico y diseño de los detalles de la nueva oferta de reestructuración, que estará abierta para la totalidad de los denominados “holdouts”, los que no adhirieron al canje de 2005.
El funcionario aclaró que, posterior a la negociación con los tenedores de bonos, la operación deberá ser convalidada por el Parlamento mediante una ley que autorice la reapertura del canje, proceso cerrado por una norma aprobada por el Legislativo en febrero de 2005.
Esa ley fue votada días después de que Argentina lograra una adhesión del 76% para reestructurar deudas con acreedores privados en mora desde 2001 por un total de $102 mil millones.
El canje se concretó en junio de 2005 con una quita sobre el capital original del 65,4%.
Muchos acreedores que no aceptaron la oferta de 2005 optaron por demandar a Argentina en tribunales de Estados Unidos y Europa para intentar recuperar el ciento% del capital original más los intereses vencidos de los títulos en su poder.
Una vez que esté diseñada la nueva oferta, los tres bancos sondearán qué nivel de aceptación hay entre los acreedores y luego lo comunicarán al Gobierno argentino, que decidirá entonces si acepta o no el canje en esas condiciones, lo que luego deberá recibir el visto bueno del Parlamento.
“Es todo un proceso que vamos a concluir antes de fin de año”, dijo el jefe de Gabinete.
Massa no quiso dar detalles de la oferta hasta tanto no sea presentada a la Comisión de Valores de Estados Unidos (SEC, por su sigla en inglés) y otros organismos de regulación financiera, pero aseguró que la propuesta “es mejor para Argentina que la de 2005 y que indudablemente la quita va a ser mayor que la que se logró” entonces.
Reveló además que la operación supondrá la llegada de “fondos frescos” al país y que los acreedores solo recibirán bonos nuevos de Descuento (con quita sobre el capital inicial), a diferencia de 2005, cuando también se ofrecieron títulos a la Par y CuasiPar.
“La propuesta es más que interesante, sobre todo teniendo en cuenta el contexto internacional”, destacó Massa, quien dijo que se complementa con otra de estos mismos bancos para refinanciar los préstamos garantizados (PG).
Se trata de títulos de deuda pública en carteras de bancos y administradoras de fondos de jubilación por unos $13.400 millones, de los cuales $7 mil vencen en los próximos dos años.
En este caso, la reestructuración será a través de un canje de esos préstamos por nuevos títulos de deuda “con mayor liquidez” en el mercado, a lo que también se agregarán “fondos frescos” para Argentina, señaló Massa.
“Esto le pone un horizonte de mucha previsibilidad al programa financiero y a los vencimientos de deuda de Argentina y le da certezas al mundo de que el país, en la medida que crece, cumple con sus obligaciones de pago”, aseguró el funcionario.
En este sentido, los representantes de los bancos internacionales destacaron que las dos operaciones “posibilitarán la reinserción de Argentina en los mercados financieros internacionales a tasas competitivas”.
Gobierno busca reestructurar la deuda en bonos públicos
Buenos Aires
EFE
Argentina anunció ayer que iniciará formalmente la puesta en marcha de una propuesta de tres bancos internacionales para reabrir la reestructuración de bonos públicos concretada en 2005 para aquellos acreedores privados que entonces no adhirieron a ese canje de deuda.
El jefe de Gabinete argentino, Sergio Massa, dijo en rueda de prensa que el Gobierno de su país resolvió poner en marcha el plan de refinanciación presentado por Barclays, Citigroup y Deutsche Bank, que contarían ya con la aceptación de tenedores de bonos por unos $7.500 millones, sobre un total de $20 mil millones que quedaron fuera del canje de hace tres años.
Tras una reunión con la presidenta argentina, Cristina Fernández, los responsables de las tres entidades firmaron ayer un acta acuerdo con el Gobierno argentino para formalizar el inicio del proceso.
Massa indicó que se iniciará el próximo jueves una etapa de análisis técnico y diseño de los detalles de la nueva oferta de reestructuración, que estará abierta para la totalidad de los denominados “holdouts”, los que no adhirieron al canje de 2005.
El funcionario aclaró que, posterior a la negociación con los tenedores de bonos, la operación deberá ser convalidada por el Parlamento mediante una ley que autorice la reapertura del canje, proceso cerrado por una norma aprobada por el Legislativo en febrero de 2005.
Esa ley fue votada días después de que Argentina lograra una adhesión del 76% para reestructurar deudas con acreedores privados en mora desde 2001 por un total de $102 mil millones.
El canje se concretó en junio de 2005 con una quita sobre el capital original del 65,4%.
Muchos acreedores que no aceptaron la oferta de 2005 optaron por demandar a Argentina en tribunales de Estados Unidos y Europa para intentar recuperar el ciento% del capital original más los intereses vencidos de los títulos en su poder.
Una vez que esté diseñada la nueva oferta, los tres bancos sondearán qué nivel de aceptación hay entre los acreedores y luego lo comunicarán al Gobierno argentino, que decidirá entonces si acepta o no el canje en esas condiciones, lo que luego deberá recibir el visto bueno del Parlamento.
“Es todo un proceso que vamos a concluir antes de fin de año”, dijo el jefe de Gabinete.
Massa no quiso dar detalles de la oferta hasta tanto no sea presentada a la Comisión de Valores de Estados Unidos (SEC, por su sigla en inglés) y otros organismos de regulación financiera, pero aseguró que la propuesta “es mejor para Argentina que la de 2005 y que indudablemente la quita va a ser mayor que la que se logró” entonces.
Reveló además que la operación supondrá la llegada de “fondos frescos” al país y que los acreedores solo recibirán bonos nuevos de Descuento (con quita sobre el capital inicial), a diferencia de 2005, cuando también se ofrecieron títulos a la Par y CuasiPar.
“La propuesta es más que interesante, sobre todo teniendo en cuenta el contexto internacional”, destacó Massa, quien dijo que se complementa con otra de estos mismos bancos para refinanciar los préstamos garantizados (PG).
Se trata de títulos de deuda pública en carteras de bancos y administradoras de fondos de jubilación por unos $13.400 millones, de los cuales $7 mil vencen en los próximos dos años.
En este caso, la reestructuración será a través de un canje de esos préstamos por nuevos títulos de deuda “con mayor liquidez” en el mercado, a lo que también se agregarán “fondos frescos” para Argentina, señaló Massa.
“Esto le pone un horizonte de mucha previsibilidad al programa financiero y a los vencimientos de deuda de Argentina y le da certezas al mundo de que el país, en la medida que crece, cumple con sus obligaciones de pago”, aseguró el funcionario.
En este sentido, los representantes de los bancos internacionales destacaron que las dos operaciones “posibilitarán la reinserción de Argentina en los mercados financieros internacionales a tasas competitivas”.