Analistas esperan reducción de intereses en EE.UU.
| Martes 11 diciembre, 2007
Analistas esperan reducción de intereses en EE.UU.
WashingtonLa Reserva Federal bajará la tasa de interés de referencia en 0,25 puntos porcentuales mañana, estiman la mayoría de los analistas, que auguran un recorte mayor del tipo de descuento para dar oxígeno al mercado de crédito.
Tras una sucesión de datos desastrosos en el mercado inmobiliario, en las últimas semanas el debate en Wall Street se ha centrado en si el banco central estadounidense reduciría los intereses en 0,25 ó 0,5 puntos porcentuales desde su nivel actual, del 4,5%.
Sin embargo, el informe del empleo publicado el viernes zanjó la incógnita, al alejar, por ahora, el fantasma de la recesión.
Con 94 mil nuevas adiciones a las plantillas en noviembre, la creación de trabajo superó las expectativas y apuntó a una economía en ralentización, pero no en caída libre.
Más inmediatos a corto plazo son los problemas del sistema financiero, que aún no se ha recuperado del descalabro que sufrió en agosto y setiembre, según los expertos.
A la hora de fijar su política monetaria en su reunión del martes, “la preocupación principal de la Reserva no será tanto la economía, sino la estabilidad de los mercados financieros”, opinó Kevin Logan, economista del banco de inversión Dresdner Kleinwort Wasserstein.
Desde que estallara la burbuja inmobiliaria en Estados Unidos, el gran temor de los inversores es comprar por error títulos cuyos activos sean hipotecas de riesgo, otorgadas a personas con mal historial de crédito y cuya morosidad se ha disparado.
Del mismo modo, los bancos acumulan efectivo por el miedo a prestarlo a otra entidad que oculte un arcón lleno de esos papeles, que nadie quiere ver ni en pintura.
Aquí es donde ayudaría una bajada del tipo de descuento, que es la tasa que la Reserva cobra a los bancos cuando estos toman préstamos de muy corto plazo del banco central.
“Si sabes que el banco al que prestas puede a su vez pedir prestado a la Reserva Federal, se disminuirá el temor a dar créditos”, afirmó Kathleen Stephansen, una analista de Credit Suisse First Boston.
Normalmente el tipo de descuento se mueve al mismo ritmo que la tasa de referencia, la cual determina los intereses que afrontan los consumidores en sus tarjetas de crédito y en los préstamos para la compra de automóviles, por ejemplo.
No obstante, la mayoría de los analistas parece apostar esta vez por una bajada del tipo de descuento de 0,5 puntos porcentuales, hasta el 4%, una reducción que es el doble que la prevista para el de referencia.
Además, Rob Carnell, un economista del banco de inversión ING, dijo que es posible que la Reserva Federal adopte otras medidas para aumentar la liquidez, como permitir a entidades que no sean bancos obtener esa clase de créditos.
Como suele ocurrir en la economía, la mera expectativa de la bajada ha tenido ya un efecto real, pues el viernes ya se apreciaron señales en los mercados de que los bancos están más dispuestos a prestarse unos a otros, según Logan.
Pese a los problemas de liquidez, hasta ahora la ventanilla de prestamos del banco central ha estado casi desierta porque acudir a ella ha sido visto como “un acto de desesperación”, de acuerdo a este economista.
“Si vas, es que nadie más te quiere prestar dinero, lo que hace pensar que pasa algo malo contigo”, afirmó.
Logan cree, sin embargo, que la previsible bajada de ese tipo de interés hará más atractiva esa opción, frente al mercado privado de dinero, donde el capital “está muy justo”.
En todo caso, el abaratamiento de esos préstamos a corto plazo será otra señal de la Reserva Federal de que está dispuesta a inyectar liquidez si las cosas empeoran, como ya hiciera en los peores días del verano en Nueva York.
Eso es precisamente lo que necesita un mercado asustadizo que, según los expertos, aún se siente rodeado de fantasmas.
WashingtonLa Reserva Federal bajará la tasa de interés de referencia en 0,25 puntos porcentuales mañana, estiman la mayoría de los analistas, que auguran un recorte mayor del tipo de descuento para dar oxígeno al mercado de crédito.
Tras una sucesión de datos desastrosos en el mercado inmobiliario, en las últimas semanas el debate en Wall Street se ha centrado en si el banco central estadounidense reduciría los intereses en 0,25 ó 0,5 puntos porcentuales desde su nivel actual, del 4,5%.
Sin embargo, el informe del empleo publicado el viernes zanjó la incógnita, al alejar, por ahora, el fantasma de la recesión.
Con 94 mil nuevas adiciones a las plantillas en noviembre, la creación de trabajo superó las expectativas y apuntó a una economía en ralentización, pero no en caída libre.
Más inmediatos a corto plazo son los problemas del sistema financiero, que aún no se ha recuperado del descalabro que sufrió en agosto y setiembre, según los expertos.
A la hora de fijar su política monetaria en su reunión del martes, “la preocupación principal de la Reserva no será tanto la economía, sino la estabilidad de los mercados financieros”, opinó Kevin Logan, economista del banco de inversión Dresdner Kleinwort Wasserstein.
Desde que estallara la burbuja inmobiliaria en Estados Unidos, el gran temor de los inversores es comprar por error títulos cuyos activos sean hipotecas de riesgo, otorgadas a personas con mal historial de crédito y cuya morosidad se ha disparado.
Del mismo modo, los bancos acumulan efectivo por el miedo a prestarlo a otra entidad que oculte un arcón lleno de esos papeles, que nadie quiere ver ni en pintura.
Aquí es donde ayudaría una bajada del tipo de descuento, que es la tasa que la Reserva cobra a los bancos cuando estos toman préstamos de muy corto plazo del banco central.
“Si sabes que el banco al que prestas puede a su vez pedir prestado a la Reserva Federal, se disminuirá el temor a dar créditos”, afirmó Kathleen Stephansen, una analista de Credit Suisse First Boston.
Normalmente el tipo de descuento se mueve al mismo ritmo que la tasa de referencia, la cual determina los intereses que afrontan los consumidores en sus tarjetas de crédito y en los préstamos para la compra de automóviles, por ejemplo.
No obstante, la mayoría de los analistas parece apostar esta vez por una bajada del tipo de descuento de 0,5 puntos porcentuales, hasta el 4%, una reducción que es el doble que la prevista para el de referencia.
Además, Rob Carnell, un economista del banco de inversión ING, dijo que es posible que la Reserva Federal adopte otras medidas para aumentar la liquidez, como permitir a entidades que no sean bancos obtener esa clase de créditos.
Como suele ocurrir en la economía, la mera expectativa de la bajada ha tenido ya un efecto real, pues el viernes ya se apreciaron señales en los mercados de que los bancos están más dispuestos a prestarse unos a otros, según Logan.
Pese a los problemas de liquidez, hasta ahora la ventanilla de prestamos del banco central ha estado casi desierta porque acudir a ella ha sido visto como “un acto de desesperación”, de acuerdo a este economista.
“Si vas, es que nadie más te quiere prestar dinero, lo que hace pensar que pasa algo malo contigo”, afirmó.
Logan cree, sin embargo, que la previsible bajada de ese tipo de interés hará más atractiva esa opción, frente al mercado privado de dinero, donde el capital “está muy justo”.
En todo caso, el abaratamiento de esos préstamos a corto plazo será otra señal de la Reserva Federal de que está dispuesta a inyectar liquidez si las cosas empeoran, como ya hiciera en los peores días del verano en Nueva York.
Eso es precisamente lo que necesita un mercado asustadizo que, según los expertos, aún se siente rodeado de fantasmas.