ADM y Cargill invierten $560 millones en Brasil
Redacción La República redaccion@larepublica.net | Lunes 09 mayo, 2011
ADM y Cargill invierten $560 millones en Brasil
Archer-Daniels-Midland Co., la mayor procesadora de granos, y Cargill Inc. planean invertir alrededor de $560 millones en nuevas refinerías de biocombustible en Brasil, un país que ya tiene el doble de la capacidad que necesita.
La agroindustria estadounidense se ha sumado a compañías brasileñas que expanden sus instalaciones y apuestan a que el gobierno duplicará, y llevará al 10%, la cantidad de biocombustible que debe mezclarse con el diesel de petróleo, lo que aumentaría la demanda de inmediato.
En momentos en que el petróleo está por encima de los $100 por barril, la Presidenta, Dilma Rousseff, busca combustibles alternativos para llenar los tanques de los camiones y contener la inflación.
La petrolera brasileña Petrobras no quiere quedarse atrás y llevará su producción de etanol de 5% a 15% en los próximos cuatro años, como parte de un plan del gobierno que busca contener el precio del combustible que subió casi 40% en el último año.
“Vamos a avanzar rápidamente para producir el 10%, 12%, 15% en tres, cuatro años. Con eso, Petrobras se transformará en un regulador eficiente en el suministro y la fijación de los precios del etanol”, explicó Edison Lobão, ministro Minas y Energía de Brasil.
Petrobras es responsable en la actualidad del 5% de la producción total de etanol en Brasil, que espera producir para 2017 unos 64 mil millones de litros y convertirse así en el mayor productor mundial del ramo.
En la actualidad, Estados Unidos es el mayor productor del biocombustible, aunque Brasil es el principal exportador mundial.
En los últimos 12 meses, el precio del etanol subió en Brasil 39,2% (contra una inflación de 6,51% en el mismo período).
El importante mercado de consumo interno de etanol se consolidó luego de que al inicio de la década se adoptara el motor híbrido que permite el uso indistinto de etanol o gasolina, o ambos mezclados en cualquier proporción.
El aumento de la producción también impulsaría la economía de la región empobrecida del centro-oeste de Brasil, en la que tiene sede la mayor parte de la industria.
Sao Paulo/ Bloomberg
Archer-Daniels-Midland Co., la mayor procesadora de granos, y Cargill Inc. planean invertir alrededor de $560 millones en nuevas refinerías de biocombustible en Brasil, un país que ya tiene el doble de la capacidad que necesita.
La agroindustria estadounidense se ha sumado a compañías brasileñas que expanden sus instalaciones y apuestan a que el gobierno duplicará, y llevará al 10%, la cantidad de biocombustible que debe mezclarse con el diesel de petróleo, lo que aumentaría la demanda de inmediato.
En momentos en que el petróleo está por encima de los $100 por barril, la Presidenta, Dilma Rousseff, busca combustibles alternativos para llenar los tanques de los camiones y contener la inflación.
La petrolera brasileña Petrobras no quiere quedarse atrás y llevará su producción de etanol de 5% a 15% en los próximos cuatro años, como parte de un plan del gobierno que busca contener el precio del combustible que subió casi 40% en el último año.
“Vamos a avanzar rápidamente para producir el 10%, 12%, 15% en tres, cuatro años. Con eso, Petrobras se transformará en un regulador eficiente en el suministro y la fijación de los precios del etanol”, explicó Edison Lobão, ministro Minas y Energía de Brasil.
Petrobras es responsable en la actualidad del 5% de la producción total de etanol en Brasil, que espera producir para 2017 unos 64 mil millones de litros y convertirse así en el mayor productor mundial del ramo.
En la actualidad, Estados Unidos es el mayor productor del biocombustible, aunque Brasil es el principal exportador mundial.
En los últimos 12 meses, el precio del etanol subió en Brasil 39,2% (contra una inflación de 6,51% en el mismo período).
El importante mercado de consumo interno de etanol se consolidó luego de que al inicio de la década se adoptara el motor híbrido que permite el uso indistinto de etanol o gasolina, o ambos mezclados en cualquier proporción.
El aumento de la producción también impulsaría la economía de la región empobrecida del centro-oeste de Brasil, en la que tiene sede la mayor parte de la industria.
Sao Paulo/ Bloomberg