¡Adiós Kuznetsova!
| Lunes 29 junio, 2009
¡Adiós Kuznetsova!
Londres
EFE
La llave femenina de Wimbledon vivió el fin de semana una jornada de “shock”, cuando se dieron las eliminaciones de la rusa Svetlana Kuznetsova y la serbia Jelena Jankovic, obligadas bruscamente a dejar el torneo en tercera ronda.
Nadie anticipaba la salida de Jankovic, sexta favorita, que se sintió “débil, mareada y agotada” y temió “perder la consciencia y terminar en el hospital”.
Esta jugadora se rindió en tres sets a la jovencísima norteamericana Melanie Oudin, de solo 17 años, una de las grandes promesas de las nuevas generaciones que empiezan a empujar en el tenis estadounidense y, para muchos, todavía una desconocida.
La adolescente se negó a amilanarse: “Me dije que ella era una jugadora más y que éste era un partido más en un torneo más y no quise pensar que estaba en la pista principal de Wimbledon jugando por primera vez contra mi primera rival de entre las diez primeras”, indicó Oudin de su experiencia ante la serbia.
Sorprendió, también, que en la pista 1 la alemana Sabine Lisicki echara en 2 sets a otra de las “top five”, la rusa Svetlana Kuznetsova, número cinco del mundo.
No hubo dramas, sin embargo, en el hogar de las Williams. La mayor de las ilustres hermanas, Venus, esgrimió un saque de vértigo —de hasta 200 kilómetros por hora— para “vengarse” de la canaria Carla Suárez, la jugadora que la derribó en el Abierto de Australia este año; mientras que la primera favorita, la rusa Dinara Safina, continuó sin sustos frente a la belga Kirsten Flipkens.
El cuadro masculino de Wimbledon no se resintió con salidas imprevistas. En el All England Club avanzaron sin resbalones el estadounidense Andy Roddick, el australiano Lleyton Hewitt y el británico Andy Murray
Vuelve a dar de qué hablar Lleyton Hewitt, un hombre que ha recuperado la “garra” de antaño y que además presume de haberse proclamado campeón de Wimbledon en 2002, al imponerse al argentino Nalbandián.
Londres
EFE
La llave femenina de Wimbledon vivió el fin de semana una jornada de “shock”, cuando se dieron las eliminaciones de la rusa Svetlana Kuznetsova y la serbia Jelena Jankovic, obligadas bruscamente a dejar el torneo en tercera ronda.
Nadie anticipaba la salida de Jankovic, sexta favorita, que se sintió “débil, mareada y agotada” y temió “perder la consciencia y terminar en el hospital”.
Esta jugadora se rindió en tres sets a la jovencísima norteamericana Melanie Oudin, de solo 17 años, una de las grandes promesas de las nuevas generaciones que empiezan a empujar en el tenis estadounidense y, para muchos, todavía una desconocida.
La adolescente se negó a amilanarse: “Me dije que ella era una jugadora más y que éste era un partido más en un torneo más y no quise pensar que estaba en la pista principal de Wimbledon jugando por primera vez contra mi primera rival de entre las diez primeras”, indicó Oudin de su experiencia ante la serbia.
Sorprendió, también, que en la pista 1 la alemana Sabine Lisicki echara en 2 sets a otra de las “top five”, la rusa Svetlana Kuznetsova, número cinco del mundo.
No hubo dramas, sin embargo, en el hogar de las Williams. La mayor de las ilustres hermanas, Venus, esgrimió un saque de vértigo —de hasta 200 kilómetros por hora— para “vengarse” de la canaria Carla Suárez, la jugadora que la derribó en el Abierto de Australia este año; mientras que la primera favorita, la rusa Dinara Safina, continuó sin sustos frente a la belga Kirsten Flipkens.
El cuadro masculino de Wimbledon no se resintió con salidas imprevistas. En el All England Club avanzaron sin resbalones el estadounidense Andy Roddick, el australiano Lleyton Hewitt y el británico Andy Murray
Vuelve a dar de qué hablar Lleyton Hewitt, un hombre que ha recuperado la “garra” de antaño y que además presume de haberse proclamado campeón de Wimbledon en 2002, al imponerse al argentino Nalbandián.