Acciones de General Motors caen hasta 30%
| Martes 11 noviembre, 2008
Acciones de General Motors caen hasta 30%
Nueva York -- El grupo estadounidense General Motors (GM) perdió ayer en la Bolsa de Nueva York hasta un 30% de su valor, después de haber reconocido que podría quedarse sin liquidez suficiente para continuar con sus operaciones.
Los títulos del grupo automovilístico llegaron a cambiarse ayer a $3,02 cada uno, un precio que no se veía desde 1946, aunque hacia la media sesión recuperaron parte del terreno perdido y se cambiaban a $3,2, un 26% menos que el viernes, cuando cerró a $4,36.
Ese día, GM reveló que su situación financiera es crítica y que su liquidez se reduce a marchas forzadas, de forma que incluso en la primera mitad de 2009 podría no alcanzar el mínimo necesario para continuar con sus operaciones.
Ello le ha obligado a renunciar de momento a una posible fusión con Chrysler, una intención que fue ampliamente publicada por la prensa estadounidense aunque ningún grupo la confirmó y que habría requerido una inyección pública de unos $10 mil millones.
Solo en el tercer trimestre del año, la compañía perdió $2.500 millones, aunque sus ventas aumentaron el 13%, hasta $37.900 millones, y consumió una media de $2.300 millones de dólares, más del doble de lo calculado por los analistas del sector.
Su competidor Ford también llegó a bajar ayer un 6%, aunque hacia la media sesión perdía el 4%, hasta $1,9 por acción, después de anunciar la semana pasada unas pérdidas de $129 millones en el tercer trimestre del año.
El resultado operativo de esta firma, la segunda del sector en Estados Unidos, reflejó una pérdida de $2.980 millones.
Ambos gigantes de Detroit acumulan cuantiosas pérdidas, que en 2006 ascendieron a $38 mil millones en el caso de GM y a $2.700 millones en el de Ford.
General Motors reclama a las autoridades estadounidenses que acudan en su ayuda a través de una potente inyección de capital que permita su supervivencia, tal y como han hecho en los últimos meses con grandes firmas del sector financiero.
Sin embargo, el motivo de su petición no está relacionado con la devaluación de sus inversiones a causa de la crisis crediticia, sino con la desaceleración de su actividad y los problemas derivados del modelo de negocio en que está basada la industria automovilística.
Analistas de Barclays Capital y Deutsche Bank redujeron sus cálculos sobre el precio objetivo de los títulos de GM hasta $1 y $0, respectivamente, y advirtieron que en los próximos meses la compañía no podrá continuar con sus operaciones y deberá declararse en bancarrota, a no ser que reciba una inyección pública.
Nueva York -- El grupo estadounidense General Motors (GM) perdió ayer en la Bolsa de Nueva York hasta un 30% de su valor, después de haber reconocido que podría quedarse sin liquidez suficiente para continuar con sus operaciones.
Los títulos del grupo automovilístico llegaron a cambiarse ayer a $3,02 cada uno, un precio que no se veía desde 1946, aunque hacia la media sesión recuperaron parte del terreno perdido y se cambiaban a $3,2, un 26% menos que el viernes, cuando cerró a $4,36.
Ese día, GM reveló que su situación financiera es crítica y que su liquidez se reduce a marchas forzadas, de forma que incluso en la primera mitad de 2009 podría no alcanzar el mínimo necesario para continuar con sus operaciones.
Ello le ha obligado a renunciar de momento a una posible fusión con Chrysler, una intención que fue ampliamente publicada por la prensa estadounidense aunque ningún grupo la confirmó y que habría requerido una inyección pública de unos $10 mil millones.
Solo en el tercer trimestre del año, la compañía perdió $2.500 millones, aunque sus ventas aumentaron el 13%, hasta $37.900 millones, y consumió una media de $2.300 millones de dólares, más del doble de lo calculado por los analistas del sector.
Su competidor Ford también llegó a bajar ayer un 6%, aunque hacia la media sesión perdía el 4%, hasta $1,9 por acción, después de anunciar la semana pasada unas pérdidas de $129 millones en el tercer trimestre del año.
El resultado operativo de esta firma, la segunda del sector en Estados Unidos, reflejó una pérdida de $2.980 millones.
Ambos gigantes de Detroit acumulan cuantiosas pérdidas, que en 2006 ascendieron a $38 mil millones en el caso de GM y a $2.700 millones en el de Ford.
General Motors reclama a las autoridades estadounidenses que acudan en su ayuda a través de una potente inyección de capital que permita su supervivencia, tal y como han hecho en los últimos meses con grandes firmas del sector financiero.
Sin embargo, el motivo de su petición no está relacionado con la devaluación de sus inversiones a causa de la crisis crediticia, sino con la desaceleración de su actividad y los problemas derivados del modelo de negocio en que está basada la industria automovilística.
Analistas de Barclays Capital y Deutsche Bank redujeron sus cálculos sobre el precio objetivo de los títulos de GM hasta $1 y $0, respectivamente, y advirtieron que en los próximos meses la compañía no podrá continuar con sus operaciones y deberá declararse en bancarrota, a no ser que reciba una inyección pública.