Inflación o tasas de interés, ¿cuál escoger?
Fabio Parreaguirre fparreaguirre@larepublica.net | Martes 29 enero, 2013
Estabilidad en costo de vida beneficia a la mayoría
Inflación o tasas de interés, ¿cuál escoger?
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El principal problema que enfrenta la economía nacional este año es conocer el objetivo de la política monetaria que deberá revelar el Banco Central a más tardar esta semana, sin conocer todavía si defenderá la inflación o velará por tasas de interés más bajas.
Esos dos escenarios se nos presentan, partiendo de la base de que se mantendría el sistema de bandas con el piso actual (¢500 por dólar), y que no existirá una reforma tributaria este año que ataque el problema real (déficit de gobierno).
La primera posibilidad consiste en la custodia para que el costo de vida no crezca, dejando la tasa de interés alta. Es el escenario que hemos vivido durante los últimos años.
Asimismo, vemos como el Central agotó sus recursos el año pasado defendiendo el tipo de cambio para que el piso se mantuviera en ¢500 por dólar y el colón no se encareciera más, comprando hasta $1.500 millones.
Si aplicara esta misma filosofía durante 2013, el Central esterilizaría parte de la emisión de los $1 mil millones que el gobierno utilizará para atender sus gastos, es decir, recompraría colones que él mismo puso a circular por medio de emisiones de bonos y otros, indicó Rudolf Lüke, economista del Instituto de Investigaciones en Ciencias Económicas de la UCR.
Así, no generaría presión sobre los precios y podría mantener la inflación debajo del 6%, la tónica desde 2011.
Por otro lado, el investigador expone una segunda opción, donde el Central flexibilice su objetivo de inflación, y permita que el dinero circulante en la economía crezca, sin recomprar.
Así, al no esterilizar los ¢500 mil millones, generaría mayor inflación a finales de año en un rango superior al 7%, mientras que las tasas de interés bajarían del 6,5% al 7,5% producto del exceso de liquidez en la economía.
Esto generaría un impacto positivo en la inversión y el consumo, manteniendo el rango de crecimiento en lo estimado, y dando un nuevo panorama a la economía nacional.
Recordemos que uno de los principales problemas con que tiene que lidiar la economía en este inicio de año es la entrada de capital golondrina, que desestabilizó el flujo de los últimos tres años.
Estos capitales entran al país gracias al premio por invertir en moneda nacional, por la atractiva tasa de interés que tenemos (cercana al 8%), en relación con las tasas internacionales que están bajas, un tipo de cambio estable en el piso de la banda en los últimos dos años y la buena percepción que tienen del país los inversionistas extranjeros.
Fabio Parreaguirre
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