MODA

Homenaje al buen vestir masculino

Grandes diseñadores reunidos en París y Milán mostraron sus nuevas propuestas para el armario masculino

Armani presentó una propuesta elegante. AFP / La República

Las ciudades de París y Milán fueron los escenarios en los cuales se mostraron las nuevas tendencias marcadas por grandes diseñadores
La Semana de la Moda masculina de Milán tocó a su fin con las propuestas de DSquared2 y Giorgio Armani, entre otros, en los que la pasarela pasó de ser una volcánica isla del Pacífico a convertirse en un manantial de elegancia con el traje de chaqueta como único protagonista.
Volcanes, lianas y plantas exóticas inundaron la pasarela, una estética en la que los diseñadores gemelos de DSquared2 se han basado para crear su colección de hombre de la próxima temporada primavera/verano.
Una colección ecléctica, que mezcla diferentes tipos de prendas bajo los patrones de estos dos diseñadores italianos, con una estética rompedora, llamativa y que, al mismo tiempo y con solo una ojeada, transporta directamente a Hawái o a cualquier otra isla del Pacífico.

Trajes de chaqueta que no lo son, cortados en todas las direcciones; camisas lisas, cortadas por una línea vertical que parte su monocromía; grandes parcas que cubren la desnudez de los aborígenes y un sinfín de alusiones a la época de los colonos, con grandes sombreros de paja y estampados de mimbre en sus prendas más selectas, como los trajes de noche.
Por su parte, en París la pasarela salió de viaje con los modelos de primavera-verano para hombre de Jean Paul Gaultier e Issey Miyake Men, quienes rindieron homenaje al turista y a los paisajes de la travesía.
El diseñador Yusuke Takahashi firmó su primera colección al frente de la línea masculina de la casa japonesa Issey Miyake con unos modelos que recorren el mundo, de Marruecos a Turquía, pasando por Sri Lanka, como aseguró a Efe tras el desfile.
El azul cielo se va degradando hasta teñirse de arena del desierto en una túnica, mientras los cuellos mao evocan la herencia asiática y los trajes con recuadros de aleatorio rojo, marino y blanco recuerdan a Occidente.

 

París / Efe