El aporte de las mujeres
| Jueves 08 marzo, 2012
Ambos sexos recogerán los mejores frutos complementándose, aunque haya sido necesario el enfrentamiento para obtener derechos
El aporte de las mujeres
El periodismo es una fascinante profesión en la cual la mujer se abrió campo, como en tantas otras, y es también un duro reto, especialmente en algunos casos. Baste recordar a las corresponsales de guerra que comparten mil peligros y entregan su vida, al igual que los hombres, en muchos casos, para cumplir con su labor.
Hoy los medios de comunicación están llenos de mujeres que le hacen frente a un día a día casi siempre agotador y de gran responsabilidad.
Pero esto no es una excepción. Millones de mujeres en el mundo se enfrentan en la actualidad a las responsabilidades que implica haberse incorporado a las fuerzas laborales que mueven las ruedas del avance de la humanidad, y lo hacen con mucha energía y satisfacción, porque se sienten cosechando los frutos de una fuerte lucha emprendida hace años, para tener los mismos derechos que los hombres, desarrollar su intelecto, tomar decisiones y actuar en la vida de las naciones.
Esto, que les significó también independencia económica, se tradujo en un trascendental cambio que modificó las sociedades. Esos cambios han obligado también a los hombres a adaptarse a las nuevas reglas del juego y en no pocos casos el proceso, aún no concluido, mantiene en situación de crisis las relaciones entre ambos sexos.
No obstante, lo más importante quizás de estos logros de las mujeres será que los conserven sin perder nada de sus mejores cualidades, las inherentes a su género y aquellas que desarrollaron obligadas por siglos de confinamiento, en la mayoría de los casos, al ámbito del hogar y a sus múltiples labores manuales.
El mundo se beneficia hoy del aporte de la visión y la acción de las mujeres, como complemento necesario al de los hombres, justamente en la medida en que aquellas contribuyan desde su condición y no intentando emular a los varones.
Ambos sexos recogerán los mejores frutos siempre complementándose, aunque haya sido necesario el enfrentamiento para obtener derechos y falte aún camino por recorrer.