¡Cartaginés al cuarto!

Los brumosos se hospedaron en su habitación preferida tras derrotar a Belén

Kevin Arrieta de Belén, tuvo que correr para frenar la escapada de Daniel Quirós del Cartaginés, un relevo fulminante. www.imagenesencostarica.com/La República

Hace una semana madrugó El Zorro para empalmar un derechazo que viajó a la red y fue suficiente para que Cartaginés derrotara por la mínima al Santos.
Ayer le tocó madrugar a Johan Condega, quien apenas en el minuto 8, recibió globito de Andrés Lezcano, se quitó la marca de Mauricio Núñez y crucificó a Anthony Vargas con un trallazo que abrió la cuenta.
El gol dio a los locales un espacio para controlar las acciones de un juego que tenían que ganar o ganar, para rayar a la UCR en la clasificación y meterse los brumosos entre los eventuales semifinalistas.
¡Misión cumplida!
Máxime cuando en el cierre de la etapa, los anfitriones aumentaron la cuenta a dos en el minuto 45, después de volar metralla sobre el marco belemita; el balón fue y vino, Condega se lo puso a Néstor Monge, este sostuvo para acribillar, lo dobletearon y por ahí salió un rebote flojo directo a las piernas del gatillero Lezcano, que lo devolvió a los cordeles con remate exacto y colocado.
Belén no carburó; si no se juntan a mostrar las virtudes que tienen Varela, Cordero y Cancela, el cuadro de Briansse Camacho se parte en dos y los aguerridos defensores como Arrieta, Chang, Acosta quedan a la intemperie y Leonardo Adams no recibe nada adelante.
El 2-0 se agigantó cuando a dos minutos de la segunda parte fue expulsado el defensa José Carlos Chang y Belén quedó desamparado; el técnico Camacho tuvo que reordenar al equipo, apresurar y agotar los cambios y cuando se lesionó el goleador Adams a 12 minutos del final no pudo sustituirlo.
Claudio Ciccia refrescó su nómina con tres variantes simultáneas y Cartaginés pudo hacer fiesta frente a un rival diezmado y limitado, incluso sin ambiciones de triunfo pues jugaba por trámite.

En el cierre, Johan Condega, que pegó un mortero en el palo horizontal en el primer tiempo, botó el 3-0 solo frente a Vargas, tras recibir el llamado pase de la muerte de Daniel Quirós.
Victoria bien elaborada por el Cartaginés, urgentísima, necesarísima, que lo instala en el cuarto lugar, posición muy habitual de los brumosos al través de su historia, pero lo vital, que le permitió sobrepasar a los celestes por un punto y un juego menos. Ahora el Saprissa tiene la palabra el miércoles, si le da a los universitarios una nueva oportunidad, derrotando al cuadro de la Vieja Metrópoli o estos terminan de amarrar la clasificación.

Gaetano Pandolfo
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