¿A qué sabe Costa Rica?
| Jueves 20 diciembre, 2012
¿A qué sabe Costa Rica? ¿A frutos cítricos? ¿A cocos del Caribe? ¿A vientos del Pacífico? ¿A especias, hojas y flores comestibles que aún no se consumen mucho… pero cuyos sabores nos aguardan para deleitarnos?
¿A qué sabe Costa Rica?
La cocina costarricense ha estado representada hasta ahora por platillos típicos muy sabrosos como los picadillos de arracache o de papa, con carne o con chorizo, el arroz con pollo, los tamales de cerdo, los enyucados, el tradicional gallo pinto y otros dignos exponentes más. Pero ¿qué sigue?
Nuestras escuelas gastronómicas han preparado a nuevos profesionales que ya están llegando al mercado laboral. Gracias a nuestros agricultores y a los avances de la ciencia, los ingredientes han mejorado muchísimo y su oferta, me refiero a la de los producidos en Costa Rica, es sumamente variada. Mientras tiempo atrás si acaso se conseguían dos tipos de lechugas, tenemos ahora en el mercado siete o más variedades con diversos sabores y colores espectaculares.
Esta combinación de nuevos cocineros costarricenses y nuevos ingredientes solo puede resultar en una evolución: Se están gestando nuevos platos ticos. ¿Pero dónde están esos nuevos platos? Por ahora, lamentablemente en solo uno o dos menús de los cocineros más atrevidos. La cocina tradicional costarricense es deliciosa, pero la moderna cocina tica lo es más aún. Los platos de nuestras abuelas y abuelos no tienen nada de malo, pero los preparados por esta nueva generación de cocineros sin duda los superarán: Un pollo con coco y especias con un ligero toque de picante caribeño, una ensalada de mamones con gajos de naranja, un lomo acompañado de angú de guineo en lugar del tradicional puré de papa. Estos son solo algunos de los platillos que debemos probar para darles su lugar en la cocina costarricense.
Se ha preguntado usted ¿A qué sabe nuestra Costa Rica? ¿A frutos cítricos? ¿A cocos del Caribe? ¿A vientos del Pacífico? ¿A bosques de leguminosas? ¿A cebollas y ajos? ¿A esas especias, hojas y flores comestibles que aún no se consumen mucho por ser poco conocidas pero cuyos sabores inéditos nos aguardan para deleitarnos?
Los agricultores nos han traído los ingredientes, a los cocineros nos corresponde transformarlos en un plato y a los comensales hacer que este permanezca en el tiempo. Anímese y apoye la evolución gastronómica que estamos viviendo. Atrévase a probar estos nuevos platos y sabrá a qué sabe Costa Rica.
Edgar Alvarez R.
Chef Ejecutivo