Urge gerente deportivo que fiscalice dirección técnica de la Sele

Luego del Mundial, Francia celebró, Croacia sorprendió, Alemania desilusionó y Costa Rica frustró, para destacar algunas de las cualidades de las selecciones luego de Rusia 2018.

Dos meses y medio pasaron y los países que no tuvieron tan buenos resultados comenzaron a buscar una reestructuración en su planilla, algunos rejuveneciendo sus planteles y otros lanzando al capitán (director técnico) del barco por la borda para iniciar un nuevo proceso.

Óscar Ramírez dejó el banquillo patrio en silencio, asumió interinamente Rónald González y aplicó su modelo de juego.

Ahora la Fedefútbol nombrará a finales de año al nuevo timonel y todas las selecciones deberán acoplarse a su filosofía del juego, dejando en el pasado los errores de “Machillo” o elementos positivos por mantener.

Borrón y cuenta nueva; otra vez

Lamentablemente y a lo largo de la historia más reciente, Costa Rica no ha definido un estilo de juego o perfil de jugador.

“Creo que la Fedefútbol carece de una metodología, donde las ligas menores trabajen por igual según el perfil del jugador costarricense, para eso se necesita un director deportivo”, señaló Jackeline Álvarez, entrenadora y exseleccionada.

Costa Rica carece de un gerente deportivo que defina los modelos de juego y perfiles de técnicos que se adapten al fútbol tico.

Y no por el contrario, donde cada entrenador que asume, borre todo lo que hizo su antecesor.

“Hay un desorden en la Federación, ahora hay que empezar de cero y el que llegue tiene que sentar las bases pero con la ayuda de Rónald para indicarle la percepción de lo que se hizo en los fogueos. Si no se hace esto, sí estamos destinados al fracaso”, dijo Álvarez.

Durante el Mundial de Rusia la Tricolor apostó a las ideas de “Machillo”, planteando un 5-4-1 con jugadores acompañando por las bandas al delantero en solitario (Marco Ureña).

Este esquema no cambió sin importar el rival, ya fuera Trinidad y Tobago en la eliminatoria o durante amistosos de peso.

Ahora llegó al banquillo de manera interina Rónald González, quien modificó el sistema, subiendo un jugador más al ataque, para un 4-4-2 que utilizó ante Corea del Sur.

Posteriormente varió al tradicional 5-4-1 ante Japón y se vio mejor.

Sin embargo, la dirección de González es una muestra de que cada técnico trae consigo su biblia futbolística y son los jugadores quienes cada término deben adecuarse a este nuevo personaje, que históricamente nunca duró más de cuatro años en el cargo de manera consecutiva.

Próximamente será un nuevo técnico, quien traiga consigo su estilo de juego y los últimos meses de trabajo con González y experimentos en los amistosos, no sirvan como avance.

Será borrón y cuenta nueva ante la falta de un norte del que carece la Fedefútbol en sus diferentes selecciones.

Meses atrás la entidad dio a conocer el interés de contratar a un gerente deportivo que fiscalice la parte deportiva de la Tricolor y supervise el trabajo, tanto del próximo entrenador de la nacional, como el del actual director de selecciones menores, Marcelo Hugo Herrera.

La Tricolor jugará dos amistosos el siguiente mes, el primero ante el Tri el jueves 11 de octubre en el Estadio Universitario de Monterrey, en México.

El segundo, ante Colombia, será disputado el martes 16 de octubre en el Estadio Red Bull Arena, en Nueva Jersey, Estados Unidos.

Luego de dos fechas FIFA, donde la Nacional también enfrentó en Asia a Corea del Sur y Japón, aún la Fedefútbol no ha elegido al nuevo timonel pese a que originalmente se comprometió a nombrarlo para octubre.

LA REPÚBLICA intentó conocer los parámetros y fecha de elección del nuevo director deportivo por medio de los encargados de prensa de la Federación pero no hubo respuesta al cierre de edición.