¿Recibe su bebé demasiada proteína?
Melissa González mgonzalezt@larepublica.net | Viernes 28 octubre, 2011
¿Recibe su bebé demasiada proteína?
Crecimiento acelerado en la niñez podría conllevar a problemas de sobrepeso en la edad adulta
Criar niños “rellenitos” antes era sinónimo de buena salud; sin embargo, con el tiempo esos paradigmas han caído y son cada vez más los médicos que recomiendan poner más atención a los alimentos que se les están dando.
Precisamente consumir más proteínas de las recomendadas es una de las razones por las cuales los niños menores de cinco años podrían predestinarse a padecer obesidad o sobrepeso en el futuro, según explicó el Dr. Rafael Quevedo, gerente médico de Pfizer Nutrition Venezuela, Centroamérica y el Caribe.
El médico comentó que, a diferencia del pasado, cuando los especialistas querían que los niños crecieran y fueran lo más “gorditos” dentro del menor tiempo, ahora es lo contrario, esto porque se ha podido observar a través de la investigación que si el niño crece de manera muy rápida en las primeras etapas de su vida o meses, podría impulsar el desarrollo de más células grasas, algo que en la vida adulta podría producir problemas de peso.
“Eso se da por el consumo de alimentos altísimos en proteína, incluidas en fórmulas infantiles especialmente, por ello estos niños son más ‘gorditos’ que los que se alimentan con la leche materna, ya que esta tiene niveles de proteína menor, por lo que crecen más lentamente pero bien dentro de su desarrollo”, indicó.
Según el especialista se trata de un problema global, por lo que se están desarrollando productos que se asemejen más a la leche materna; su recomendación es que este tipo de fórmulas contengan 12 gramos de proteína por litro.
“Aquí hay dos mensajes importantes, se trata de que el niño se alimente con leche materna, pero si no se puede, se debe buscar una fórmula que se asemeje a esta. También es importante que los pediatras midan el crecimiento y lleven un monitoreo con las curvas de crecimiento de la Organización Mundial de la Salud, que fueron construidas con niños que son alimentados exclusivamente con leche materna”, recomendó.
Por su parte, los resultados de la Investigación NOURISH realizada a 1.203 profesionales de la salud en 12 países, reveló que ocho de cada diez informaron que los padres están preocupados porque su hijo no recibe la suficiente cantidad de nutrientes, pero solo el 43% informó que los padres están preocupados porque su hijo esté recibiendo demasiadas cantidades.
“Los resultados de la Investigación NOURISH subrayan que el público puede no entender este concepto vital: una nutrición adecuada significa lograr un equilibrio óptimo de nutrientes, y también gran parte de ciertos nutrientes incluso aquellos que son importantes para el desarrollo de un niño pueden influir negativamente en la salud a largo plazo”, comentó el especialista.
Según la Organización Mundial de la Salud, en 2010 alrededor de 43 millones de niños menores de cinco años de edad tenían sobrepeso, y cada año fallecen por lo menos 2,8 millones de personas adultas como consecuencia del sobrepeso o la obesidad.
Además esta organización estima que en los países en desarrollo están viviendo cerca de 35 millones de niños con sobrepeso, mientras que en los países desarrollados esa cifra es de 8 millones.
Melissa González
mgonzalezt@larepublica.net
Crecimiento acelerado en la niñez podría conllevar a problemas de sobrepeso en la edad adulta
Criar niños “rellenitos” antes era sinónimo de buena salud; sin embargo, con el tiempo esos paradigmas han caído y son cada vez más los médicos que recomiendan poner más atención a los alimentos que se les están dando.
Precisamente consumir más proteínas de las recomendadas es una de las razones por las cuales los niños menores de cinco años podrían predestinarse a padecer obesidad o sobrepeso en el futuro, según explicó el Dr. Rafael Quevedo, gerente médico de Pfizer Nutrition Venezuela, Centroamérica y el Caribe.
El médico comentó que, a diferencia del pasado, cuando los especialistas querían que los niños crecieran y fueran lo más “gorditos” dentro del menor tiempo, ahora es lo contrario, esto porque se ha podido observar a través de la investigación que si el niño crece de manera muy rápida en las primeras etapas de su vida o meses, podría impulsar el desarrollo de más células grasas, algo que en la vida adulta podría producir problemas de peso.
“Eso se da por el consumo de alimentos altísimos en proteína, incluidas en fórmulas infantiles especialmente, por ello estos niños son más ‘gorditos’ que los que se alimentan con la leche materna, ya que esta tiene niveles de proteína menor, por lo que crecen más lentamente pero bien dentro de su desarrollo”, indicó.
Según el especialista se trata de un problema global, por lo que se están desarrollando productos que se asemejen más a la leche materna; su recomendación es que este tipo de fórmulas contengan 12 gramos de proteína por litro.
“Aquí hay dos mensajes importantes, se trata de que el niño se alimente con leche materna, pero si no se puede, se debe buscar una fórmula que se asemeje a esta. También es importante que los pediatras midan el crecimiento y lleven un monitoreo con las curvas de crecimiento de la Organización Mundial de la Salud, que fueron construidas con niños que son alimentados exclusivamente con leche materna”, recomendó.
Por su parte, los resultados de la Investigación NOURISH realizada a 1.203 profesionales de la salud en 12 países, reveló que ocho de cada diez informaron que los padres están preocupados porque su hijo no recibe la suficiente cantidad de nutrientes, pero solo el 43% informó que los padres están preocupados porque su hijo esté recibiendo demasiadas cantidades.
“Los resultados de la Investigación NOURISH subrayan que el público puede no entender este concepto vital: una nutrición adecuada significa lograr un equilibrio óptimo de nutrientes, y también gran parte de ciertos nutrientes incluso aquellos que son importantes para el desarrollo de un niño pueden influir negativamente en la salud a largo plazo”, comentó el especialista.
Según la Organización Mundial de la Salud, en 2010 alrededor de 43 millones de niños menores de cinco años de edad tenían sobrepeso, y cada año fallecen por lo menos 2,8 millones de personas adultas como consecuencia del sobrepeso o la obesidad.
Además esta organización estima que en los países en desarrollo están viviendo cerca de 35 millones de niños con sobrepeso, mientras que en los países desarrollados esa cifra es de 8 millones.
Melissa González
mgonzalezt@larepublica.net