Política evitaría muerte del euro
Redacción La República redaccion@larepublica.net | Viernes 07 octubre, 2011
Política evitaría muerte del euro
Los inversores que apuestan a que la zona del euro no sobrevivirá entera a su crisis de deuda pueden estar olvidando una cosa: la voluntad de los políticos de mantenerla unida.
La canciller alemana Angela Merkel intensifica su defensa de la moneda. El presidente francés Nicolas Sarkozy dice que no hay más alternativa que brindar ayuda a Grecia ya. De lo contrario se corre el riesgo del tipo de cataclismo que desencadenó el derrumbe de Lehman Brothers Holdings Inc. en 2008. El primer ministro griego George Papandreou propuso esta semana nuevas medidas de austeridad de 6.600 millones de euros ($8.700 millones) en medio de una recesión que se encamina al cuarto año.
El euro es “un proyecto político”, dijo Erik Nielsen, economista jefe global de UniCredit Group en Londres. “El mercado puede no haberles creído, pero los gobernantes han dicho una y otra vez que harán lo que sea necesario para mantener su integridad”.
Mantener unida la región de 17 países significa que la política tendrá que seguir siendo el elemento aglutinador, lo que desafía la argumentación de inversores como el máximo responsable ejecutivo de Pacific Investment Management Co., Mohamed El-Erian, que dice que la zona del euro podría tener que reducirse para sobrevivir. Ese temor se hace evidente en la creciente brecha entre las tasas de interés a 10 años de Alemania e Italia.
En lo que constituye un indicio de que los inversores cuestionan la longevidad del euro, el diferencial entre los bonos de referencia alemanes e italianos alcanzó casi 400 puntos básicos luego de haberse mantenido por debajo de los 50 puntos básicos durante la mayor parte de la última década. Cuatro de cada 10 consultados en la Encuesta Global trimestral de Bloomberg dijeron el mes pasado que estimaban que un país abandonaría el euro en un año, mientras que un 32% dijo que un miembro lo abandonaría en entre dos y cinco años.
“Muchos inversores globales consideran que Grecia es un precedente para Italia”, dijo Holger Schmieding, economista jefe de John Berenberg Gossler Co. en Londres. “Pronto podría haber una prueba de si las defensas europeas son lo suficientemente fuertes para evitar un contagio de Grecia a Italia”.
La prueba podría llegar en las semanas anteriores a la cumbre de los días 3 y 4 de noviembre de los gobernantes del Grupo de los 20, que se realizará en Cannes, Francia, instancia que los jefes de finanzas internacionales consideran el plazo para que los gobiernos europeos generen soluciones a la crisis.
Londres
La canciller alemana Angela Merkel intensifica su defensa de la moneda. El presidente francés Nicolas Sarkozy dice que no hay más alternativa que brindar ayuda a Grecia ya. De lo contrario se corre el riesgo del tipo de cataclismo que desencadenó el derrumbe de Lehman Brothers Holdings Inc. en 2008. El primer ministro griego George Papandreou propuso esta semana nuevas medidas de austeridad de 6.600 millones de euros ($8.700 millones) en medio de una recesión que se encamina al cuarto año.
El euro es “un proyecto político”, dijo Erik Nielsen, economista jefe global de UniCredit Group en Londres. “El mercado puede no haberles creído, pero los gobernantes han dicho una y otra vez que harán lo que sea necesario para mantener su integridad”.
Mantener unida la región de 17 países significa que la política tendrá que seguir siendo el elemento aglutinador, lo que desafía la argumentación de inversores como el máximo responsable ejecutivo de Pacific Investment Management Co., Mohamed El-Erian, que dice que la zona del euro podría tener que reducirse para sobrevivir. Ese temor se hace evidente en la creciente brecha entre las tasas de interés a 10 años de Alemania e Italia.
En lo que constituye un indicio de que los inversores cuestionan la longevidad del euro, el diferencial entre los bonos de referencia alemanes e italianos alcanzó casi 400 puntos básicos luego de haberse mantenido por debajo de los 50 puntos básicos durante la mayor parte de la última década. Cuatro de cada 10 consultados en la Encuesta Global trimestral de Bloomberg dijeron el mes pasado que estimaban que un país abandonaría el euro en un año, mientras que un 32% dijo que un miembro lo abandonaría en entre dos y cinco años.
“Muchos inversores globales consideran que Grecia es un precedente para Italia”, dijo Holger Schmieding, economista jefe de John Berenberg Gossler Co. en Londres. “Pronto podría haber una prueba de si las defensas europeas son lo suficientemente fuertes para evitar un contagio de Grecia a Italia”.
La prueba podría llegar en las semanas anteriores a la cumbre de los días 3 y 4 de noviembre de los gobernantes del Grupo de los 20, que se realizará en Cannes, Francia, instancia que los jefes de finanzas internacionales consideran el plazo para que los gobiernos europeos generen soluciones a la crisis.
Londres