Merkel figura como un antídoto contra la crisis y la izquierda
EFE | Miércoles 10 diciembre, 2014
Merkel figura como un antídoto contra la crisis y la izquierda
La Unión Cristianodemócrata (CDU) reeligió ayer en bloque a Angela Merkel, como su líder a la canciller, que llamó a sus filas a defender la contención presupuestaria y a presentar batalla ante una alianza de la izquierda capaz de apearla del poder.
Con 14 años dirigiendo el partido y nueve al frente del Gobierno, Merkel obtuvo un respaldo más que abultado -el 96,7%-, apenas algo por debajo de su récord de 2012 -97,9%-. No llegó a histórico, ya que en el pasado la CDU expresó su devoción a sus líderes en términos del 100%, como fue el caso de Konrad Adenauer.
Su octava elección como jefa del partido tuvo como escenario el congreso federal convocado en Colonia, la ciudad natal de Adenauer, el canciller fundacional de la República Federal de Alemania (RFA) y presidente del partido de 1950 a 1966.
Al espíritu del gran patriarca, así como al de su mentor Helmut Kohl -líder del partido durante 25 años y "canciller de la reunificación", recordó Merkel- dedicó la jefa de la CDU los apartados más emotivos de su discurso.
A quien fue su antecesor en la presidencia de la CDU y ahora es su ministro de Finanzas, Wolfgang Schäuble, le correspondieron en cambio elogios más vinculados al presente, al reconocerle como el artífice de la solidez económica que ha defendido Alemania en medio de la crisis de la zona euro.
Schäuble, piedra de toque de su Gobierno en la defensa de la austeridad, ha sacado adelante el desafío del "presupuesto con déficit cero" para el año próximo, en un país como Alemania, "que ha demostrado que la austeridad no está reñida con el crecimiento ni con la inversión", dijo la canciller.
El lema del congreso de Colonia era "Trabajamos para el futuro de Alemania" y en ese porvenir entra, a juicio de la canciller, la defensa de la austeridad que siempre representó Schäuble, ausente en el discurso por encontrarse "cumpliendo con su deber en Bruselas".
Hay que seguir trabajando por el futuro de Alemania, un país respetado en el contexto internacional y que supo superar mejor que otros la crisis gracias al esfuerzo de contención representado por su ministro de Finanzas, insistió Merkel.
"Tenemos menos de tres millones de desempleados, tenemos el desempleo juvenil más bajo de la zona euro", enfatizó la canciller, para quien la contención fue la receta del éxito en la peor fase de la crisis y debe ser también la clave de su prosperidad futura.
Merkel evocó algunos logros alcanzados en la presente legislatura en gran coalición con los socialdemócratas, entre ellos la mejora de las jubilaciones a las madres.
Rompió una lanza además a favor del Partido Liberal (FDP), el socio natural de la CDU en tiempos de Adenauer, de Kohl y también en su segunda legislatura, ahora fuera del Parlamento y al que Merkel ansía recuperar como fuerza parlamentaria.
Tras los buenos deseos al socio perdido se escondía la siguiente gran andanada de la canciller: la llamada a la movilización contra un bloque opositor que, hoy por hoy, tendría mayoría parlamentaria.
La canciller se vio abocada a formar una gran coalición con los socialdemócratas hace un año, ya que, a pesar de haber rozado la mayoría absoluta, se quedó sin los liberales para gobernar y tampoco cuajó una alianza con los Verdes, algo que hoy lamentó públicamente.
La formación, la semana pasada, del primer Gobierno en un estado alemán, el de Turingia, liderado por La Izquierda y con socialdemócratas y Verdes como socios abre un horizonte peligroso para la canciller, ya que la suma de estas tres formaciones podría teóricamente derribarla.
La cuestión no se plantea para la presente legislatura, entre otras cosas debido a la superioridad de las filas de Merkel frente a los socialdemócratas.
Colonia (Alemania)/EFE