Italianos dicen
| Viernes 14 septiembre, 2007
Italianos dicen “basta pasta”
Roma -- Grupos italianos pro defensa del consumidor y asociaciones de agricultores encabezaron un boicot de un día a la pasta y el pan para protestar contra una serie de “injustificados” aumentos de precios.
La protesta tenía por meta resaltar los aumentos “especulativos” de los precios, dijo Sergio Marini, presidente de Coldiretti, uno de los grupos que organizaron la huelga, en una declaración enviada por correo electrónico.
Coldiretti dice que los aumentos de precios han obligado a los consumidores del país a reducir las compras de pasta y de pan. Los italianos compran cerca de 28 kilogramos de pasta de harina cada año, según el portal electrónico del sindicato de trabajadores de la industria de la pasta.
La pasta se vendió a 4,5 euros por kilo en las tiendas durante los cinco primeros meses de este año, en comparación con solo 22 céntimos de euro por kilo el trigo usado para hacerla, según un estudio de Ismea-AC Nielsen publicado por Coldiretti.
La raíz del problema es el aumento pronunciado de los precios mundiales del trigo, según Giada Giani, economista de Lehman Brothers en Londres. “Es una tendencia general que afecta a los precios agrícolas en todo el mundo”, dijo Giani en una entrevista telefónica.
Los precios mundiales del trigo llegaron a alturas sin precedente este mes porque el mal tiempo perjudicó las cosechas en todo el mundo.
Si bien la huelga tiene algunos partidarios destacados, entre ellos el ministro de Justicia Clemente Mastella, conseguir que los italianos dejen de comer pasta no es nada fácil. “Tenemos la pasta en nuestro ADN, no podemos vivir sin ella a ningún precio, y los productores lo saben”, dijo Stefano Caldarini, jefe de camareros del histórico bar-restaurante romano Canova.
Roma -- Grupos italianos pro defensa del consumidor y asociaciones de agricultores encabezaron un boicot de un día a la pasta y el pan para protestar contra una serie de “injustificados” aumentos de precios.
La protesta tenía por meta resaltar los aumentos “especulativos” de los precios, dijo Sergio Marini, presidente de Coldiretti, uno de los grupos que organizaron la huelga, en una declaración enviada por correo electrónico.
Coldiretti dice que los aumentos de precios han obligado a los consumidores del país a reducir las compras de pasta y de pan. Los italianos compran cerca de 28 kilogramos de pasta de harina cada año, según el portal electrónico del sindicato de trabajadores de la industria de la pasta.
La pasta se vendió a 4,5 euros por kilo en las tiendas durante los cinco primeros meses de este año, en comparación con solo 22 céntimos de euro por kilo el trigo usado para hacerla, según un estudio de Ismea-AC Nielsen publicado por Coldiretti.
La raíz del problema es el aumento pronunciado de los precios mundiales del trigo, según Giada Giani, economista de Lehman Brothers en Londres. “Es una tendencia general que afecta a los precios agrícolas en todo el mundo”, dijo Giani en una entrevista telefónica.
Los precios mundiales del trigo llegaron a alturas sin precedente este mes porque el mal tiempo perjudicó las cosechas en todo el mundo.
Si bien la huelga tiene algunos partidarios destacados, entre ellos el ministro de Justicia Clemente Mastella, conseguir que los italianos dejen de comer pasta no es nada fácil. “Tenemos la pasta en nuestro ADN, no podemos vivir sin ella a ningún precio, y los productores lo saben”, dijo Stefano Caldarini, jefe de camareros del histórico bar-restaurante romano Canova.