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Fujimori recibe máxima pena de 25 años de cárcel

| Miércoles 08 abril, 2009




Ex presidente peruano fue condenado ayer por delitos de violación de los derechos humanos
Fujimori recibe máxima pena de 25 años de cárcel

Defensa aduce que apelará sentencia mediante un recurso de nulidad

Lima
EFE

El ex presidente Alberto Fujimori recibió ayer la pena más dura que permite el código penal peruano, 25 años de cárcel, por delitos de violación de los derechos humanos, en una sentencia considerada histórica.
Escuchó el fallo con su habitual semblante imperturbable y de inmediato se acercó a consultar a su abogado defensor, César Nakazaki, para anunciar que interponía un recurso de nulidad, que fue aceptado por la sala especial que lo juzga.
Con traje oscuro y corbata Fujimori se había pasado la última sesión del juicio tomando notas con aplicación, con aire sereno pero preocupado, y su propio médico, Alejandro Aguinaga, señaló que se encontraba bien en este día crucial para su vida.
Más airada, su hija y heredera política, Keiko Fujimori, declaró al cerrarse este juicio desarrollado a lo largo de 161 sesiones que el fallo "es una aberración y destila odio y venganza".
"Obviamente, no nos vamos a quedar de brazos cruzados, vamos a salir pacíficamente a las calles a respaldar a Alberto Fujimori", advirtió.
Según Keiko, "millones se unirán a esta cruzada en reconocimiento al mejor presidente que ha tenido el país (entre 1990 y 2000)", pero lo cierto es que los simpatizantes fujimoristas eran no más de 500 personas en los alrededores del tribunal.
Estos simpatizantes se encontraron con un grupo de sindicalistas contrarios a Fujimori y se enzarzaron a golpes en los exteriores del tribunal, pero fue el único momento de tensión en una zona que desde el lunes por la noche había sido tomada por la policía.
Fujimori, de 70 años, fue encontrado culpable de los delitos de homicidio calificado y asesinato con alevosía, lesiones graves y secuestro por las matanzas de Barrios Altos y La Cantuta, que dejaron 25 muertos en 1991 y 1992, además del secuestro de un periodista y un empresario en 1992.
La lectura de la versión resumida del fallo se demoró tres horas y atrajo la atención de decenas de periodistas nacionales e internacionales, organismos defensores de los derechos humanos y juristas internacionales llegados como observadores.
"Es un mensaje positivo sobre el papel de la justicia en un gobierno democrático y sobre la protección a los derechos humanos -dijo a Efe Maria McFarland, de Human Rights Watch-. Además, es una corte nacional la que hace justicia, algo poco común, y más en un país donde hace pocos años las cortes estaban controladas".
El hecho de que el tribunal haya calificado los delitos como crímenes de la humanidad, algo que no siempre sucede en instancias internacionales fue destacado por Eduardo Bertoni, de la Fundación para un debido proceso legal.
Por su parte, Luis Puig, responsable de derechos humanos de la principal central obrera del Uruguay, calificó la resolución judicial como "una victoria de los derechos humanos en América y en el mundo".
"El Estado peruano ratificó su ineludible compromiso con el derecho internacional y se reafirma que los delitos de lesa humanidad no proscriben", dijo a Efe.
Me parece que este tipo de sentencias fortalece el Estado de Derecho cuando se combate la impunidad bajo la cual se cubren algunos funcionarios que han cometido graves violaciones", aseguró el titular del Centro de Acción Legal para los Derechos Humanos (Caldh) de Guatemala, Mario Minera.
"Cualquier sentencia que vaya en esa dirección -en el combate a la impunidad- envía un mensaje de esperanza para quienes están esperando por largos años que se haga justicia", ratificó.
El Caldh asesora a varias víctimas del pasado conflicto armado (1960-1996) que buscan juzgar a ex altos jefes militares y ex jefes de facto por los delitos de genocidio en este país centroamericano.
Había gran expectación entre los juristas sobre si el tribunal utilizaría el argumento de la "autoría mediata", es decir, considerar al acusado responsable como cabeza de una organización criminal aunque no existieran pruebas de órdenes directas para la comisión de crímenes.
El tribunal citó en su sentencia esta tesis de la "autoría mediata, que se encuentra suficientemente acreditada", en su sentencia de más de 700 páginas que colgó en la página web del Poder Judicial peruano al poco de hacerla pública.
El tribunal que ha juzgado a Alberto Fujimori ha merecido durante todo el proceso las alabanzas de las partes, tanto la fiscalía como la defensa, pero Rolando Souza, miembro del equipo defensor, ya señaló a la salida que consideraba la sentencia "excesiva y antidemocrática", porque "viola el derecho probatorio".






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