Cuestión de actitud
| Miércoles 04 noviembre, 2009
Cuestión de actitud
La actitud es un término definido según la psicología, como la postura que adopta el ser humano de acuerdo con los diferentes movimientos del ánimo, expresada de algún modo en particular.
Esto supone que la actitud que adopta una persona o un grupo de individuos depende del conjunto de creencias, como también de las múltiples experiencias y relaciones que se hayan ido acumulando a lo largo de su historia de vida.
No obstante, la actitud va muy ligada a la autoestima, entendiéndose esta como la aceptación incondicional de uno mismo, y la disposición de asumir la responsabilidad de lo que sucede en nuestra vida y entorno.
Está claro que una actitud edificante exige una vida de lucha para darle forma a la realidad que deseamos vivir, en todos los campos, sean estos deportivos, académicos, culturales o de otra índole.
La lucha es esencial, sin ella no existen ni el crecimiento ni el progreso. El triunfo no viene solo, y quienes esperan la oportunidad a expensas de la suerte, desperdician su vida esperando.
Las metas se alcanzan cuando la actitud aglutina y orienta todas las aptitudes para tal fin, de allí la importancia de levantar y empuñar la bandera de los ideales, para alcanzar las metas propuestas mediante el trabajo y el esfuerzo.
Sin embargo, un mundo sin obstáculos y problemas es imposible, pero una buena actitud es fundamental para creernos capaces de determinar la manera en que se van a encarar los desafíos.
Sin esfuerzo no hay realización, y la relación existente entre la lucha y el progreso, van a permitir desmantelar los prejuicios a través del análisis racional, a pesar de que todo depende de la actitud.
La actitud del ser humano está en proceso de continuo cambio, el cual debe acoplarse a las circunstancias, conocimientos y experiencias, para llegar a establecer hábitos y estrategias con el objetivo de extraer más de nuestro potencial.
Finalmente, la autoestima es el juicio de valor más importante en el desarrollo psicológico y la motivación del individuo que le va muy bien a la actitud, porque supone cultivar la esencia del valor humano.
Luis Fernando Allen Forbes
Director ejecutivo
Asociación Salvemos el Río Pacuare
La actitud es un término definido según la psicología, como la postura que adopta el ser humano de acuerdo con los diferentes movimientos del ánimo, expresada de algún modo en particular.
Esto supone que la actitud que adopta una persona o un grupo de individuos depende del conjunto de creencias, como también de las múltiples experiencias y relaciones que se hayan ido acumulando a lo largo de su historia de vida.
No obstante, la actitud va muy ligada a la autoestima, entendiéndose esta como la aceptación incondicional de uno mismo, y la disposición de asumir la responsabilidad de lo que sucede en nuestra vida y entorno.
Está claro que una actitud edificante exige una vida de lucha para darle forma a la realidad que deseamos vivir, en todos los campos, sean estos deportivos, académicos, culturales o de otra índole.
La lucha es esencial, sin ella no existen ni el crecimiento ni el progreso. El triunfo no viene solo, y quienes esperan la oportunidad a expensas de la suerte, desperdician su vida esperando.
Las metas se alcanzan cuando la actitud aglutina y orienta todas las aptitudes para tal fin, de allí la importancia de levantar y empuñar la bandera de los ideales, para alcanzar las metas propuestas mediante el trabajo y el esfuerzo.
Sin embargo, un mundo sin obstáculos y problemas es imposible, pero una buena actitud es fundamental para creernos capaces de determinar la manera en que se van a encarar los desafíos.
Sin esfuerzo no hay realización, y la relación existente entre la lucha y el progreso, van a permitir desmantelar los prejuicios a través del análisis racional, a pesar de que todo depende de la actitud.
La actitud del ser humano está en proceso de continuo cambio, el cual debe acoplarse a las circunstancias, conocimientos y experiencias, para llegar a establecer hábitos y estrategias con el objetivo de extraer más de nuestro potencial.
Finalmente, la autoestima es el juicio de valor más importante en el desarrollo psicológico y la motivación del individuo que le va muy bien a la actitud, porque supone cultivar la esencia del valor humano.
Luis Fernando Allen Forbes
Director ejecutivo
Asociación Salvemos el Río Pacuare