Costa Rica, Centroamérica y China – una gran oportunidad para beneficio mutuo

Edward Wang

Ex Consejero Comercial

Embajada de Canadá en Costa Rica

China busca el respeto y el reconocimiento del mundo, lo que a Estados Unidos puede resultar difícil de aceptar, ya que lo considera una amenaza para su dominio mundial.

Entre las dos superpotencias, el espacio de maniobra para Costa Rica y otros países de la región puede parecer limitado.

Sin embargo, es importante que los países centroamericanos no tomen partido.

Deberían reconocer el hecho de que Estados Unidos ya no es el único país extranjero dominante en la región.

Aunque China no es un líder político y militar latinoamericano, su comercio e inversión podrían beneficiar significativamente el sustento de los centroamericanos.

También es importante que los centroamericanos noten que, a diferencia de China, Estados Unidos no siempre es un jugador consistente.

Podría alterar su énfasis diplomático y económico basado en la actitud y percepción de su congreso y administración.

Por ejemplo, ¿quién sabe cuáles serían las políticas de comercio y migración en la administración posterior a Biden, particularmente si fuera republicana?

Por el contrario, dado que China no tiene ningún interés militar y político en la región, el impacto de una estrecha colaboración generaría beneficios económicos y financieros.

Costa Rica y Centroamérica deberían considerar qué es lo mejor para ellos a largo plazo.

Los países de la región deben tener una voz independiente en los proyectos económicos y de desarrollo, incluyendo una postura multilateral y neutral al posicionarse entre Estados Unidos y China.

Cualquiera que esté dispuesto a ayudar de verdad en China debería encontrar oportunidades en la región.

Huawei, ZTE y China Mobile, entre otras, son empresas chinas que deberían recibir el mismo reconocimiento que cualquier proveedor estadounidense, europeo o surcoreano, manteniendo una política de equidad y neutralidad en lo que respecta al abastecimiento de bienes y servicios, y la adjudicación de contratos.

¿Por qué Centroamérica debería aceptar la presión de sanciones y presiones de Estados Unidos y Europa para no comprar equipos de telecomunicaciones, paneles solares y otros productos fabricados en China, con el argumento de que China se está portando mal en algunas provincias?

¿Ha pedido China a América Central que no compre productos norteamericanos fabricados en estados que tienen un historial deficiente en el trato a los negros y otras minorías?

La clave para que las empresas chinas sean bienvenidas es ofrecerles el respeto que se merecen.

China, por su parte, debe guiarse por la larga tradición de no injerencia en los asuntos internos, fortaleciendo su voz y difundiendo sus mensajes alentando a los funcionarios diplomáticos a dar discursos en conferencias y universidades y realizar entrevistas con los medios.

Además, se deben seguir buscando acuerdos de libre comercio e inversión con la región.