Hijos o empleo: política de dos hijos afecta a mujeres chinas
Bloomberg | Viernes 11 diciembre, 2015 12:00 a. m.
Desde que China dio a conocer sus planes de flexibilizar la política del hijo único en octubre, los usuarios ocurrentes de los medios sociales bromean con que el dato más importante que las mujeres pueden poner en su currículum es “casada con dos hijos”.
No a todos les causa gracia esto. Algunas profesionales jóvenes como Lei Jiawen de 25 años dicen que la temporada de búsqueda de empleo ha sido especialmente difícil. La nueva política probablemente esté haciendo que la búsqueda sea más dificultosa porque “tener un segundo hijo significa que el empleador debe dar una segunda licencia por maternidad”, explicó Lei. “Por eso, prefieren contratar a un hombre”.
Lei, que el año que viene se recibirá en Pekín con un título de maestría en inglés, dijo que muchos de los que buscaban personal ponían especial énfasis en los candidatos hombres y que tres de cada seis compañías que la entrevistaron preguntaron explícitamente cuándo planeaba casarse y tener hijos.
Para que China pueda reforzar con éxito una población activa cada vez más reducida permitiendo que los matrimonios tengan dos hijos, las autoridades tendrán que resolver el problema del sexismo. Si bien China tiene leyes y normas contra la discriminación abierta contra las mujeres, no se luce en hacerlas cumplir. Los portales de empleo de China publican cientos de anuncios que dicen “sólo hombres” o “preferible mujer casada con hijo”.
La discriminación se da en toda la carrera de las mujeres chinas, desde la licencia por maternidad a las diferencias de salario, dijo Lv Xiaoquan, abogada y subdirectora del Centro Zhongze de Asesoramiento y Servicios Legales para Mujeres de Pekín, agrupación que brinda ayuda legal a las mujeres.
“Dos tipos de mujeres son las que más probablemente se enfrenten a una discriminación agravada de parte de los empleadores en el mercado laboral”, señaló Lv. “El primer grupo es el de las mujeres en edad de casarse y tener hijos pero que no los han tenido y el segundo, el de las mujeres que planean tener un segundo hijo y se lo dicen a sus empleadores”.
El país implementó la política del hijo único alrededor de 1980 y tuvo unos 116 recién nacidos varones por cada 100 mujeres en 2014.
La decisión de 2013 de flexibilizar parcialmente la política del hijo único permitiendo que los matrimonios en que uno de los cónyuges es hijo único tengan dos hijos ya ha agravado la discriminación de género, de acuerdo con un estudio llevado a cabo el año pasado por el Instituto de Estudios Femeninos de China.
Casi el 60 por ciento de las estudiantes entrevistadas para el sondeo dijeron que se les preguntó si reunían las condiciones para tener dos hijos o planeaban tenerlos, y el 86% sufrió alguna forma de discriminación en el mercado laboral, escribió la autora Yang Hui, investigadora del instituto, en artículos aparecidos en China Women’s News, publicación que dirige la Federación de Mujeres de Toda China del Partido Comunista.